El Ayuntamiento licita la adecuación interior del yacimiento de Valbuena

El concejal de Patrimonio y Centro Histórico, Adrián Calonge, acompañado por el edil Rubén Antoñanzas, ha anunciado este viernes la puesta en marcha del proceso de licitación para la adecuación interior del yacimiento arqueológico de Valbuena, con el objetivo de reanudar las visitas a este recinto histórico de cara a conmemoración del V Centenario del Sitio de Logroño.

Se trata de una intervención tanto en los restos arqueológicos en sí como en el recinto que los alberga que se realizará en una única fase aunque se divide en dos ámbitos: el convento de Valbuena y en el paramento norte de la muralla napoleónica del promontorio de Valbuena.

El proyecto, que contará con un plazo estimado de ejecución de tres meses bajo la dirección de la Oficina de Regeneración Urbana y Vivienda, dispone de un presupuesto máximo de licitación de 116.996,19 euros (IVA incluido), de los cuales 7.689,54 euros estarán destinados las labores de arqueología y divulgación.

“A esta cuantía hay que añadir el completo desbroce del área de intervención que se llevará a cabo previamente y que conllevará una inversión de 9.600€. Esta incluirá una primera limpieza del yacimiento con supervisión arqueológica para preparar el terreno para las obras”, ha señalado Calonge.

El objetivo de este proyecto es abrirlo al público con motivo del V Centenario del Sitio de Logroño y adecuarlo para llevar a cabo un programa de visitas guiadas y de autovisitas en horarios controlados, siempre en relación con el conjunto expositivo que actualmente se encuentra en el Cubo del Revellín.

“Queremos abrir este yacimiento a la sociedad logroñesa, al turismo y a nuestros escolares, ya que servirá como base para un proyecto piloto de divulgación del patrimonio. Para ello, buscaremos también la colaboración del Gobierno regional y comenzaremos los trámites para aumentar su protección incoando un expediente para que sea Bien de Interés Cultural”, ha indicado Calonge.

El convento de Valbuena

El yacimiento del convento de Santa María de Valbuena, construido por los dominicos entre los siglos XVI y XVII, contará con un nuevo acceso, una adecuación de la caseta actual como centro de recepción de visitantes y baños y un primer panel explicativo sobre el recinto.

Se repondrá el firme del camino para facilitar la accesibilidad y posibilitar las visitas bordeando por el este y el norte el convento, la iglesia y el paramento de muralla oeste, orientado hacia la calle General Urrutia.

Se realizará una importante labor de limpieza y consolidación de los elementos pétreos, especialmente la primitiva iglesia del siglo XIII, los muros del convento y la zona del calado que permanecerá, por ahora, cerrado por seguridad; así como una limpieza y tratamiento de los elementos bióticos que afectan al yacimiento con intervenciones “quirúrgicas” en aquellos lugares donde el desbroce no haya conseguido eliminarlo.

Las superficies del yacimiento serán tratadas con las limpiezas arqueológicas de la iglesia y del convento, se acondicionarán con gravas el entorno del camino, se realizará una labor de desescombro de materiales acumulados en el entorno sur y perimetrado de seguridad en los restos arqueológicos y en la zona habilitada para la visita.

Se creará un nuevo punto de observación al final del camino para contemplar la muralla del siglo XIX que mira al General Urrutia y que conserva también el foso; así como una plataforma de madera para el acceso al interior de la iglesia, tanto a la iglesia-salón del siglo XVI (rehabilitada gracias al taller de cantería que trabajó en el yacimiento) como a la primitiva cabecera del siglo XIII. Esto supondrá también la creación de dos puntos de observación sobre el convento que aprovecharán dos de las capillas laterales del recinto eclesial del siglo XVI.

Desde el punto de vista más didáctico, se elaborará un plan para colegios ligado al del Cubo del Revellín, ahora en proceso de cambio de contenidos.

Finalmente, se llevará a cabo una completa señalización y explicación de cada una de las partes del yacimiento: se habilitarán dos puntos de información de mayor formato en la entrada explicar la evolución histórica del enclave, su relación con la ciudad y con el V Centenario; ocho puntos de información secundarios completando la información de los dos anteriores en formato QR para permitir el acceso a más información mediante los medios digitales; y tres rótulos advirtiendo sobre el peligro de caída.

La muralla napoleónica

Paralelamente a las labores anteriores, y con el objetivo de poner en valor las murallas del siglo XIX que dan al Parque del Ebro, se eliminará el alud de tierra que hay en la base de las murallas mediante la excavación hasta la base facilitar la conservación, la visibilidad de estos muros, de unos 9 metros de altura y, por lo tanto, la integración en el conjunto arqueológico de Valbuena.

También se llevará a cabo una limpieza de los lienzos del parque del Ebro de elementos bióticos que afectan a su estructura.

Finalmente, y dentro del plan de divulgación previsto para este recinto, se realizará colocarán dos paneles informativos, al inicio y al final de los tramos conservados, que contarán con códigos QR para acceder a contenidos adicionales mediante smartphones u otros dispositivos digitales.

Por su parte, Rubén Antoñanzas ha manifestado que “la historia de Valbuena es una historia importantísima de la ciudad”. En ese sentido, ha dicho que desde el Partido Riojano “denunciamos el abandono del yacimiento arqueológico de Valbuena por parte del PP durante toda la pasada legislatura y nos comprometimos a continuar con su recuperación y reapertura ya en el próximo mandato, en caso de formar parte del gobierno del Ayuntamiento”.

“Valbuena es un ejemplo de cómo la recuperación del patrimonio y la historia de la ciudad puede generar empleo y atraer turismo, como quedó claro entre el 2007 y el 2011, con el Partido Riojano en el gobierno municipal, cuando se trabajó en el yacimiento de Valbuena por parte de la Escuela Taller y estuvo abierto al público llegando a registrar más de 2.000 visitas”, ha expresado el concejal.

Según sus datos, “los restos de Valbuena se fueron recuperando gracias al trabajo de la escuela taller de cantería. Es decir, además de recuperar Valbuena, se formaron chavales de Logroño que fueron quienes trabajaron la piedra y cantería”.

Por eso, para Antoñanzas supone una gran satisfacción que se liciten las obras de adecuación del interior del yacimiento arqueológico de Valbuena como elemento patrimonial de indudable atractivo. En su opinión, “las aportaciones del señor Calonge mejorarán el disfrute del espacio durante las visitas, ya que la plataforma de madera permitirá el acceso al interior de la iglesia”.