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Opinión - Pedir perdón y que resulte sincero. Por Esther Palomera

Un poco más cerca

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Rioja2

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Había que ganar. No se podía fallar. Los puntos eran muy necesarios para seguir ahí arriba, entre los cuatro mejores. Y eso fue lo que hizo la Unión Deportiva Logroñés. Victoria. El brillo para otra ocasión. 0-1. Suficiente. Ahora a otra historia. El colista del grupo I de Segunda B no lo puso fácil, ya se sabía. Por eso, el choque resultó más áspero de lo que se imaginaba. Pocas ocasiones y duelo equilibrado. Hasta con sufrimiento. Demasiado. Pero el Marino de Luano no quería ceder ni un ápice y pudo quebrar el sueño de los visitantes. Menos mal que Álex Santelices corrigió a sus compañeros Miguel Santos y Miguel para sacar en la línea de gol el tiro de Draman en casi la única opción de los locales.

Por suerte, previamente la calidad de los blanquirrojos había decido el rumbo de la contienda. En concreto, la de Íker Alegre al filo del descanso. A la segunda porque el asturiano avisó con un tiro centrado en los prolegómenos del choque. Ahí afinó, después no perdonó. El extremo, esperemos que le venga bien para recuperar su mejor versión futbolística, aprovechó una asistencia de lujo de Menudo, pase entre los centrales, para batir por bajo a José Luis. Un tanto que tranquilizó a un bloque riojano con novedades en el once.

Herreros y Álex Santelices volvían a coincidir en el eje de la zaga tras el triunfo en Somozas (con idéntico resultado a favor). Una pareja fiable en momentos de gran responsabilidad. Donde más cambios hubo fue en la medular. Con Abaroa y Chevi en el doble pivote, Camochu ejerció de enganche para que Menudo gozara de libertad de movimientos arriba, mientras que Titi e Íker Alegre se colocaban en los costados. Un once que se fajó en Miramar en un encuentro complejo porque medirse al colista obliga al triunfo. Mucho que perder y poco que ganar. Pero la motiviación de los riojanos tiene premio: poder disputar el 'play off'.

Con esa mentalidad partió la UDL. Serio, práctico, sin permitir concesiones a un rival que no se jugaba nada en el envite, salvo el orgullo. El cuadro de Carlos Pouso quería asumir el mando y el tiro de Íker Alegre y el remate de Herreros en los primeros compases así lo acreditaban. Menudo, al cuarto de hora, tuvo la mejor oportunidad. Centro de Titi y remate, a bote pronto, desde el punto de penalti que se marchó alto rozando el larguero. A la mente vinieron las ocasiones falladas en A Malata y no se podía volver a repetir. Pero el cuadro blanquirrojo no bajó su intensidad y continuó trabajando para acercarse a José Luis.

Asistencia de Menudo

Menudo se difrazó de mago con un pase entre los centrales para permitir a Íker Alegre superar al meta de los asturianos en el minuto 41. Se había hecho lo difícil, marcar. Ahora tocaba ser paciente, no relajarse y seguir peleando por los 3 puntos. En el segundo tiempo, el Marino, sobre todo con los cambios, quiso dar un paso adelante. A la UDL, cómoda, no le importó. Mejor, así podía salir a la contra. El riesgo, como siempre, es dejarse dominar demasiado. Pero no fue el caso.

Pese a que hubo que un susto inesperado. Lío entre Miguel Santos y Miguel, midió mal, que dejó la pelota a Draman para marcar. El jugador del Marino ya estaba celebrando el empate, pero Álex Santelices sacaba bajo palos. Los nervios en las filas visitantes fueron más que evidentes. Faltaban 20 minutos y podía haber dudas. Muneta, en la acción siguiente, pudo cerrar el partido, pero su ajustado tiro fue repelido en 'palomita' por José Luis. La UDL no se quería dejar encerrar.

Un último esfuerzo y los puntos eran de los riojanos. Cualquier falta lateral podía generar peligro. Ahí centró toda la atención la UDL, en hacerse fuerte en ese tipo de acciones. El Marino quería, pero no podía. Los pupilos de Carlos Pouso no debían tirar por la borda el trabajo realizado por falta de tensión. Así que hubo apretar los dientes y buscar la manera de tener más la posesión de la pelota, Muneta entró en juego para esa labor, aunque tampoco pasaba nada por dejarse querer y buscar la contra con la velocidad de Joel Valencia, ya en el campo al sustituir a Titi. El tiempo pasaba sin que ocurriera nada. Control blanquirrojo y sensación de que el 'play off' no se escapa.

Por de pronto, el Guijuelo, queda a 5 puntos (perdió el sábado 3-2 frente al Langreo), el Racing de Ferrol (tercero con 63 puntos, los mismos que los blanquirrojos) se enfrenta el domingo al Celta B, mientras que el Compostela (a 6 puntos con un partido menos) recibe, también el domingo, al Oviedo. Queda esperar acontecimientos, pero mirando desde arriba, habiendo cumplido en este viernes festivo ante el colista.

Marino de Luanco: José Luis; Pablo Suárez, José Ángel, Merino (Espolita, min. 66), Guaya; Adri, Dudi (Pandiani, min. 66); Draman, Omar, Luis Prendes; y Boro.

UD Logroñés: Miguel; Miguel Santos, Herreros, Álex Santelices, Sergio Martínez; Abaroa, Chevi; Titi (Joel Valencia, min. 73), Camochu (Muneta, min. 61), Íker Alegre; y Menudo (Ubis, min. 84).

Goles: 0-1, min. 41: Íker Alegre

Árbitro: Alemán Pérez (Comité de Las Palmas). Amonestó a los visitantes Camochu (min. 38) y Sergio Martínez (min. 71).

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