El tobillo de Ibai seduce a Las Gaunas

Hay un tobillo que ha seducido a Las Gaunas y que en dos certeros lanzamientos de falta ha evitado dos derrotas de la UD Logroñés. El primero fue en Mieres, contra el Caudal, y el segundo en Logroño, ayer, contra un Guijuelo que llegó a la capital riojana líder, rascó un punto y dio gracias. El tobillo pertenece al pie derecho de un jugador que apenas entraba en los planes de Raúl Llona en la pretemporada pero que, cosas del fútbol, se ha erigido como pieza clave del ataque blanquirrojo: Ibai Ardanaz.

Salió el conjunto riojano dominador en la segunda parte, ya que la primera fue para olvidar salvo por dos jugadas aisladas. Controlaba, atacaba, combinaba y creaba peligro pero no transformaba. El líder se encontraba a merced del ritmo que imprimían Moisés y Goñi. O eso parecía. Agazapado, esperando su momento, dándole a la UD Logroñés más confianza de la que podía tomarse, el Guijuelo marcó a la contra. Óscar Valero batió por bajo a Sergio López, totalmente vendido. Efectividad. Tan sólo cinco minutos antes se había retirado Garban, exdelantero blanquirrojo, entre tímidos aplausos de un público al que no consiguió levantar ni una sola vez de sus butacas en la temporada que jugó en Logroño.

La respuesta no tardó en llegar. Como los jabalíes cuando se encuentran acorralados, los locales quisieron reaccionar al instante y hacer daño. Garrido remató un cabezazo perfecto en un córner pero se marchó por el lateral. La UD Logroñés estaba entonada, como toda la segunda parte. Ubis y Barrón conectaron en la frontal del área al primer toque, el primero entró por detrás de los defensas y cuando parecía que el balón le llegaba franco para reventar a Wilfred, apareció Ibai que pasaba por allí y la mandó al muñeco.

No estuvo acertado el navarro aunque quizás se trataba de una simple maniobra de distracción para lo que llegaría más tarde. Lo fuera o no, pudo redimirse. Javi Moreno, que había firmado un partido rozando el notable, sufrió esa peladura de cable que a veces sufren los jugadores y que provocan un cortocircuito de consecuencias nefastas para el equipo. La falta que hizo al borde del área, además de hacer que se ganara una tarjeta amarilla que le costaría la expulsión diez minutos más tarde, le mostró lo que era capaz de hacer el tobillo de Ibai Ardanaz.

“Está muy cerquita, no da tiempo a que baje”, comentó alguien en la grada. “Ahí es donde te las pones en los entrenamientos cuando quieres tirar faltitas”, dijo otro. Tic. Suave. Seco. Certero. Imparable. El balón pasó por encima de la barrera y bajó. Gol. El tobillo de Ibai consiguió dibujar sonrisar en rostros más acostumbrados a las desgracias que a las pequeñas alegrías.

Sin embargo, el empate todavía había que sudarlo. A pesar del dominio local, el Guijuelo tuvo otra contra que Carlos Rubén mandó a la red. De nuevo, efectividad. Dos tiros, dos goles, aunque en este caso no subió el marcador porque lo que sí había subido era el banderín del asistente. Fuera de juego. El respetable respiró aliviado, se había remado demasiado como para morir en la orilla.

FICHA

UD Logroñés: Sergio López; Ormazábal, Herreros, Garrido, Sergio Martínez; Alain Barrón, Moisés, Goñi, Ibai, Jaime Moreno (Ubis, min. 45); Íñigo Rodríguez (Omar Chamadoira, min. 69).

CD Guijuelo: Wilfred; Rubén, Ángel Martínez, Jonathan, Razvan; Chuchi, Javi moreno, Óscar Valero, Carlos Rubén (Tomás, min. 80); Antonio Pino (Ballesteros, min. 65), Garban (Manuel Moreira, min. 58).

Goles: 0-1, Óscar Valero (min. 63); 1-1, Ibai Ardanaz (min. 80)

Árbitro: Sauledo Torrent (Comité catalán). Amonestó a Sergio Martínez, Moisés, Herreros y Asier Ormazábal, por parte de la UD Logroñés, y a Chuchi, Razvan y Ballesteros. Expulsó a Javi Moreno, del Guijuelo, por doble amarilla.

Incidencias: 1.348 en Las Gaunas. Fría tarde. Realizó el saque de honor la jugadora de pádel riojana Elisabeth Amatriain, actual número uno mundial, junto su pareja de pádel Patricia Llaguno.