Loquillo reivindica la poesía en el rock

El cantante José María Sanz “Loquillo” ha reivindicado en Logroño la poesía en la música y particularmente en el rock y ha abjurado del “rock litronero”, cuyos seguidores hacen gala de una ignorancia que ha calificado de “insufrible”.

Loquillo ofreció ayer en la capital riojana una rueda de prensa horas antes de participar en el Actual 2012, con un concierto en el teatro Bretón que es a la vez apertura de su gira “A solas” y cierre del festival logroñés, que se despide hasta 2014.

El cantante ha presentado además su nuevo disco “Su nombre era el de todas las mujeres”, basado en poemas de Luis Arberto Cuenca musicados por Gabriel Sopeña, que le acompaña en el concierto, y arreglado y producido por Jaime Estinus.

Loquillo ha afirmado que en sus primeros tiempos vender poesía en los escenarios rockeros era considerado “una marcianada”, pero que él siempre ha considerado que es más “hard” Jacques Brel que en Guns N'Roses y ha recordado que el nació al rock en con unan banda de garaje.

En este sentido ha expresado su eclecticismo a la hora de trabajar y ha asegurado que cuando “se agota” de una forma de hacer música se va a otra, siempre “mirando adelante y aprendiendo algo nuevo”, como ha demostrado a lo largo de sus 30 años de carrera.

El viejo rockero catalán (Barcelona, 1960), que acaba de finalizar una gira conmemorativa de su trigésimo aniversario en el mundo de la música, comienza hoy otra que le llevará a 25 escenarios íntimos, teatros donde pueda expresar con eficacia la fuerza de la poesía de Cuenca y de la música de Sopeña.

Loquillo ha anunciado que está preparando “sin prisa” un nuevo disco de “rock de garaje” en colaboración con Sabino Méndez, habitual compañero musical de Sanz a lo largo de toda su carrera artística, en el que estará acompañado por una banda “española y joven”, de la que no ha dado más detalles.

Ha explicado que a estas alturas de su carrera no podría permitirse cantar con un grupo “Trogloditas”, el de sus primeros tiempos porque “a las leyendas hay que dejarlas en su sitio, sin tocarlas, con respeto”.

Durante más de media hora Loquillo ha repasado a todos los aspectos de la música que se compone y se escucha hoy en día en España, donde, en su opinión, hay más creatividad que nunca, más talento que nunca y menos posibilidades de expresarlo con dignidad que nunca.

El intérprete ha dicho de sí mismo que no es un creador “simpático”, que no piensa en gustar al público cuando trabaja sino en sí mismo y “luego si puedes compartir, cojonudo”, al contrario de lo que ocurre habitualmente, que los artistas son “demasiado dependientes del público.

Ha reconocido que en cantante como él, que vive de la música y para la música necesita vender discos para continuar porque si no amortiza un disco no puede grabar el siguiente, aunque ha calificado de “acto de fe” programar una gira y editar un disco en medio de una crisis económica como la actual.

Gabriel Sopeña, que acompañaba a Loquillo en la rueda de prensa, ha dejado constancia de la autoexigencia en el trabajo del rockero catalán, que obliga a sus colaboradores a recorrer un camino de perfección difícil de transitar.

A una pregunta sobre la calidad de la difusión de la música en los medios de comunicación españoles, Loquillo ha expresado su enfado por el poco respeto con que la mayoría de las cadenas de radio tratan a la música y la “mediocridad” de lo que se oye.

Ha criticado la “gran ignorancia” de los programadores musicales de las emisoras españolas, salvo excepciones, a las que ha acusado de estar “alienando a varias generaciones”, en contraste con el respeto a compositores e intérpretes que, a su juicio, demuestran su colegas latinoamericanos.