El Ayuntamiento de Badarán solo tendrá que pagar una parte de la indemnización a la menor herida

Badarán se convirtió hace dos días en inevitable protagonista en los medios de comunicación. Este municipio de 650 ha sido titular por una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja que obliga al ayuntamiento ha correr con los gastos de una indemnización de 75.288 euros a una menor que sufrió un accidente en una comida popular del año 2009.

La niña, de entonces 13 años, perdió un ojo al resultar herida con una de las varillas de una carpa que le había prestado el anterior alcalde, el popular Ángel Morga. El resultado del fatal accidente fue la pérdida de un ojo por lo que se le tuvo que colocar una prótesis y que la familia de la niña denunciara al ayuntamiento.

“Hemos seguido el juicio del caso” dice el actual alcalde, Francisco Javier Ibáñez, “el abogado del seguro se ha encargado de todo el trámite”. Ibáñez lamenta el suceso pero reconoce que “tal y como estás las arcas, no es plato de gusto tener que abonar esa indemnización”. Sin embargo, la corporación municipal asume la sentencia, que es firme y no cabe recurso contra ella, por lo que pagará la parte que le corresponda de la indemnización mientras que la otra parte, todavía sin estipular, la abonará el seguro.

Cuando ocurrió el accidente, en septiembre de 2009, Ibáñez no era alcalde sino concejal. Por lo que también fue testigo de todo lo que ocurrió a partir de ese día. Todavía no se ha podido poner en contacto con el anterior alcalde ya que primero desean leer con detenimiento la sentencia. Tampoco se ha puesto en contacto con la familia de la menor, que ahora tendrán 16 años. “Son una familia que, aunque no residen todo el año en Badarán, sí que pasan largas temporadas en el pueblo. Nuestro trato con ellos, es como el de con cualquier otros vecinos”.

Desde esa desgraciada comida popular, el ayuntamiento ha extremado las precauciones, aunque el alcalde reconoce que es difícil controlar el uso de bienes públicos en unas fiestas o en una comida popular. “El ayuntamiento deja sillas o mesas sin ningún temor a que ocurran estas cosas, pero a veces ocurren” dice Ibáñez, al tiempo que recuerda que hace tiempo hubo un suceso similar en Badarán cuando un hombre se hirió con un cristal en el frontón municipal. “Esperamos que todo este asunto se quede aquí. No olvidemos que el ayuntamiento tiene recursos limitados”.