Un sistema de tele exploración neurológica evita que el paciente se desplace

El Servicio Riojano de Salud dispone de un sistema de exploración de neurofisiológica en tiempo real que permite explorar a un paciente ingresado en el Hospital de Calahorra de forma digital por un especialista del Hospital San Pedro de Logroño con todas las garantías.

El sistema, que funciona en La Rioja desde 2008, es uno de los pocos existentes en España -hay otro en Granada- y conecta el Hospital San Pedro con el Hospital fundación de Calahorra bajo la supervisión de la jefa de neurofisiología del San Pedro, Carmen Campos.

El sistema permite realizar alrededor de 300 exploraciones al año lo que ha supuesto desde su implantación que casi mil pacientes hayan sido diagnosticados a distancia sin necesidad de desplazarse hasta Logroño, con lo que significa de comodidad y ahorro.

En presencia del gerente del Servicio Riojano de Salud, Javier Aparicio y de la directora del Área de Salud de La Rioja, María Luz de los Mártires, la neurofisióloga Carmen Campos, ha hecho una demostración del funcionamiento del sistema.

Se trataba de explorar a una paciente, ingresada en la Fundación de Calahorra y atendida por una enfermera especializada, con el objetivo de conocer la causa de los síncopes que sufre cuando hace ejercicio físico.

La enfermera de Calahorra somete a la paciente a ciertos estímulos -apertura y cierre de ojos, respiración forzada, movimiento de extremidades y otras pruebas- que, en tiempo real, tienen un reflejo en su actividad cerebral que a su vez aparece en una pantalla en forma de gráficos.

La lectura científica de estos gráficos permitiría a la doctora Campos diagnosticar el problema y acometer su tratamiento sin necesidad de que la enferma se traslada al San Pedro.

Desde la puesta en marcha de este sistema de electroencefalografía digital se han realizado un total de 960 exploraciones neurofisiológicas, de las que 915 (un 95%) corresponden a estudios EEG convencionales y 45 (un 4%) a registros de larga duración con privación de sueño.

Los estudios han sido realizados en pacientes con edades comprendidas entre 1 mes y 91 años, si bien los mayores de 65 años son los que más se han beneficiado de este servicio con el 45% del total de exploraciones realizadas.

En los registros de larga duración son los menores de 10 años (4,5 %) los más beneficiados. El sistema ha permitido hacer la prueba accesible a toda la población, con un alto grado de aceptabilidad entre los pacientes, reduciendo los costes sociales (desplazamientos, horas perdidas de trabajo, gastos asociados al traslado), y su repercusión a la hora del diagnóstico, tratamiento e inmediatez en la atención a pacientes con patología neurológica.