David Merino: “La recuperación va para meses, no me puedo marcar plazos”

Muy cansado

pero contento por estar de vuelta en casa. El pelotari riojano David Merino recibió el alta el sábado pasado del Hospital San Pedro donde ha estado ingresado desde el lunes 5 de septiembre tras serle detectado lo que los médicos identificaron como el “Síndrome Guillain-Barré”, un trastorno neurológico que afecta a una de cada 100.000 personas.

El menor de la saga de zagueros de Villar de Torre fue trasladado al San Pedro por unos fuertes dolores musculares. Comenzó con problemas en las piernas en el Torneo Aste Nagusia de Bilbao y tras volver a entrenar empezó a notarse cansado hasta el punto de la extenuación.

“Tuve una gastroenteritis y después empecé a notar dolencias en las piernas, pensé que serían agujetas. Pero durante un entrenamiento llegué al extremo de no poder andar y marearme. Tras haceme pruebas me detectaron en Pamplona el virus. Los médicos me dijeron que el problema me vino de la propia gastroenteritis. Fue ese mismo virus que se quedó en el cuerpo”.

Han sido días de preocupaciones, de dolores y molestias, pero David comenta a Rioja2.com sentirse aliviado por estar en casa y sobre todo por saber lo que tiene. “Ahora empieza la recuperación. No he comenzado a entrenar todavía porque tengo que ir cogiendo fuerzas poco a poco. Me pudo levantar y andar pero poco mas”.

Espera y desea poder salir para ver algún partido de la Feria de San Mateo de pelota que comienza este sábado aunque los médicos le han recomendado tener paciencia. “No puedo ni debo marcarme plazos, me han avisado que lo mejor es pensar a largo plazo tiempo. Sé que la recuperación va para meses, no me puedo marcar plazos”.

Físicamente tendrá que esperar unos meses para volver a coger las fuerzas necesarias para competir pero personalmente está recuperando la ilusión. “De ánimo estoy bien. Hay que mirar para adelante e intentar superar esto lo antes que pueda. Pongo la mejor cara”.

Ha perdido algo de peso, “bastante por lo que tengo que comer de más”, y debe seguir tranquilo sin hacer ejercicio porque “todavía tengo el cuerpo débil”. Entre sus objetivos a corto plazo se marca el poder ir a ver algún partido de la Feria de San Mateo.

Precisamente, el pequeño de los Merino se quedó fuera del cartel mateo debido a su problema de salud y su hermano Miguel fue su sustituto como pareja de Irujo. “Por un lado sentí pena por no jugar pero muchísima alegría por mi hermano, se lo merece. Ojalá lo haga bien y se quede campeón”.

Merino reconoce sentir especial cariño por la feria matea, un torneo de gran calidad que como cada año engloba a pelotaris de alto nivel. “El campeonato que han hecho está muy nivelado y puede ganar cualquiera. Lo que espero es que se hagan buenos partidos y que haya buena entrada en el frontón”.

Si se le pregunta por la pareja campeona no duda en responder. “Me gustaría que llegasen a la final los dos riojanos, Augusto y Miguel, y que la chapela se quedase en casa”.

Tampoco duda en alabar la trayectoria de su hermano. “Está en un gran momento de forma y creo que le va a cubrir muy bien a Juan. Pueden hacer una gran pareja”.