Inicio de semana poco veraniego

Noches frescas e incluso frías en algunas capitales del interior peninsular. Salamanca, Burgos, Soria o Vitoria se quedan cerca de los cinco grados en plena madrugada. De día, rondando los 25 grados no parece que el calendario marque el ecuador del verano desde este fin de semana y hasta mediados de agosto.

La semana se presenta con temperaturas que se quedan lejos de los calores extremos de finales del mes de junio. Con unos cuantos grados por debajo de la media, desde hace una semana, excepto días puntuales, apenas se aprecia una sensación calor propia de julio, sobre todo en el norte peninsular. En el resto del país, al menos luce el sol aunque con tormentas, especialmente en el cuadrante noreste peninsular.

Y el inicio de esta segunda oleada de vacaciones no va a acompañar a los que han decidido dar comienza a su descanso veraniego coincidiendo con la segunda quincena de julio, que son la mayor parte de los veraneantes. Aemet anuncia tormentas y lluvias intensas en el norte, que se extenderán también al este del país. De nuevo, la costa levantina se encuentra bajo la amenaza del riesgo de tormentas. Por otro lado, hay que prestar especial atención al estado marítimo, ya que se encuentran en alerta amarilla las costas de Cantabria, Girona, A Coruña, Lugo, Asturias, Guipúzcoa y Vizcaya. Un día más, el viento va a soplar con intensidad en el Valle del Ebro, la costa de Girona y Baleares contribuyendo a hacer aún más desapacible la jornada.

Para el resto de la semana, pocos cambios. Si bien el fin de semana las temperaturas ascenderán ligeramente hasta colocarse por encima de los 30 grados, esta subida no será generalizada ni prolongada. Por tanto, semana variable y con temperaturas por debajo de los valores normales para el mes de julio.