Zapatero censura la lenta reacción de la UE

El Gobierno en bloque estudia ya medidas para contrarrestar los efectos económicos en la crisis del pepino provocada por Alemania ante el brote letal de la bacteria E.coli. En un principio, las muertes, de las que se cuentan ya 17, apuntaban, según Hamburgo, a que el origen estaba en una partida de pepinos españoles. A principios de semana, la situación se dilucidaba tras realizarse los análisis pertinentes de modo que quedó demostrado que en España no estaba el foco. Para entonces, los mercados habían cerrado sus puertas ya no solo al pepino sino también a otros productos hortofrutícolas. A día de hoy, EEUU revisa sus importaciones y Rusia ha cerrado sus puertas a los productos procedentes de toda la UE.

Ante la situación de alarma generada y, sobre todo, el daño económico que rondaría los 200 millones de euros en pérdidas, Rosa Aguilar ha exigido a Bruselas una compensación. De igual modo, se lo expresó a sus 27 colegas de la UE, así como a los consejeros de Agricultura de las diferentes comunidades autónomas, que este jueves se han reunido con ella.

Pero, Zapatero, que esta mañana concedía una entrevista a RNE, también ha exigido explicaciones de Alemania y una rectificación de Berlín. El presidente del Gobierno considera que ha actuado con “celeridad” y ha calificado de “completa y radicalmente injustas” las críticas del PP a su gestión. Ha denunciado así que el líder del PP, Mariano Rajoy, haya intentado “politizar lo que ha sido un error clamoroso” de las autoridades alemanas y que haya optado “por el camino fácil” en lugar de ayudar y hacer gestiones, como ponerse en contacto con alguna autoridad europea.

Zapatero ha tachado de “lenta” la respuesta de la Comisión Europea en este caso, porque tenía que haber reaccionado “con más contundencia y rapidez” una vez que las autoridades de Hamburgo descartaron que la infección fuera consecuencia de los pepinos españoles, y ha lamentado que no haya defendido con más claridad “las reglas del juego” fronterizas en la UE. El objetivo ahora del Gobierno es “exigir la reparación del daño causado”, que es “grave”, y hacerlo ante las instancias que proceda jurídicamente, aunque no ha aclarado si serán las autoridades europeas o alemanas.

El jefe del Ejecutivo ha calificado de “muy muy ambiciosa” la tarea que queda por delante para devolver “el buen nombre” a los productos de la huerta española, “tienen una excelente calidad y son muy competitivos”, y la normalidad en su comercialización. Zapatero ha repasado la actuación del Gobierno desde el inicio de la crisis el jueves pasado y ha considerado que se ha trabajado “con la suficiente prudencia y contundencia”.