Berlusconi podría perder la ciudad de Milán

Después de que hace dos semanas quedasen muchos resultados inciertos, ayer y hoy los italianos de 13 capitales de provincia y de seis provincias han vuelto a las urnas para elegir sus alcaldes y concejales. Los ciudadanos transalpinos tienen tiempo para votar hasta las 15 de hoy, pero a las 22 de ayer se registraba un calo en la afluencia. Del 49,67% de votantes de la primera vuelta se pasaba a un 43,6% en las elecciones para las alcaldías, mientras que en las provincia el calo alcanzaba los 12 puntos del porcentaje, pasando del 42,7% de hace dos semanas al 30,95% de ayer.

La lucha para las alcaldías de Milán y Nápoles es la que más atención está atrapando. En la ciudad del norte de Italia se trata de la primera vez desde 1992 que el poder podría volver en las manos de un candidato de centro-izquierda, después de 20 años de liderazgo del partido de Silvio Berlusconi. Letizia Moratti, candidata del Pueblo de la Libertad (partido del primer ministro italiano) que gobierna desde 2006, podría no conseguir superar el outsider propuesto por el centro-izquierda, el abogado Giuliano Pisapia. Un escenario de este tipo representaría un duro golpe para el poder de Berlusconi, que perdería así un feudo histórico . Los ciudadanos milaneses ya habían manifestado su malestar con la actual alcaldesa en la primera vuelta, cuando Pisapia había alcanzado el 48% de los votos frente al 41% de su adversaria.

En Nápoles, una ciudad plagada por el poder de los grupos mafiosos y los consiguientes problemas con la basura que inunda las calles de la ciudad, el exalcalde no ha vuelto a presentarse. En la primera vuelta, el industrial Giovanni Lettieri, del partido de Sivlio Berlusconi, había cosechado el 38,52% de los votos frente al 27,52% de su adversario, el ex magistrado Luigi de Magistris.

Tanto en Milán como en Nápoles se ha asistido a un primer día electoral caracterizado por las anécdotas. La alcaldesa de Milán, Letizia Moratti, para la cual un famoso actor que presentó ayer el acto de llegada del Giro de Italia en la Piazza del Duomo había pedido un aplauso, recibió a cambio una oleada de pitidos. En Nápoles, el alcalde de centro-derechas Giovanni Lettieri fue contestado por violar la ley visitando un colegio electoral del centro histórico de la ciudad el mismo día de las elecciones. El candidato se ha disculpado, comentando que “no conocía esa norma”.