Bruselas insiste en que España y Portugal no son comparables

A pesar de la insistencia de las autoridades europeas, hay una cierta incertidumbre y miedo al contagio portugués, que ha terminado cayendo después de Grecia e Irlanda. Por eso, Bruselas se ha anticipado y ha dejado claro que la senda por la que camina España no es la misma que la portuguesa. La comisión Europea ha señalado que España está “en el buen camino” para cumplir sus compromisos de reducción de déficit y ha pedido por ello que sea “juzgada por sus méritos” y no se establezcan “analogías ni especulaciones” con el caso de Portugal.

El comisario de Asuntos Económicos, Rehn, ha insistido en la idea de que a pesar de los retos que aguardan a España, a día de hoy “cumple sus compromisos y por tanto no hacemos analogías ni especulamos con escenarios de ese tipo”. A la par, su portavoz, Amadeu Altafaj, ha expresado su deseo de que España sea juzgada por sus meritos, pues está “en el buen camino para cumplir los objetivos acordados en términos de reducción de déficit. El país ha llevado a cabo ”reformas importantes“ que han sido ”anunciadas y aprobadas“ por el parlamento español, tales como medidas para la contención del gasto y reformas estructurales ”importantes“ como la reforma laboral.

Cumplidos los compromisos españoles, el portavoz comunitario ha pasado a contrastar la situación de España con la de Portugal, advirtiendo que no son comparables y que están a la espera de la petición formal del ministro en funciones, José Sócrates. Una vez que Lisboa pida oficialmente la ayuda, deberá negociar con los expertos de la Comisión, el Banco Central Europeo y el FMI un programa de ajuste fiscal y reformas. El primer ministro luxemburgués y presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, ha cifrado en 75.000 millones de euros el volumen de la ayuda necesaria.