Condenado por matar afganos por diversión

Jeremy Morlock ha reconocido los hechos por los que fue acusado y, ahora, condenado a 24 años de prisión por un tribunal mililtar de Washington.

Para corrobar estos hechos cinco personas testificaron y Morlock relató cómo fingían situaciones de combates para matar a tres civiles afganos. Según contó el soldado, “el plan era matar”. En el relato de los h echos contó que los miembros de su unidad hicieron uso de granadas y fusiles y así matar a inocentes que no suponían una amenaza.

Tras una declaración tan evidente los abogados de Morlock llegaron a un acuerdo con los fiscales para que se declarara culpable de asesinato premeditado, conspiración para cometer un asesinato y agresión. El combatiente estadounidense podría haber corrido peor suerte dado que si no hubiera negociado se hubiera enfrentado tenido que cumplir cadena perpetua. De esta manera en siete años podría obtener la libertad condicional.

Morlock, nacido en Alaska hace 22 años, pidió perdón al “pueblo afgano” y a sus compañeros del Ejército. El coronel Harry. D. Tunnell, responsable de los soldados implicados en el macabro juego, tuvo que ser apartado del cargo aunque no ha sido acusado.

Ahora la revista alemana “Der Spiegel” ha publicado unas fotografías de los soldados, entre ellos Morlock, en las que posan con los cadáveres de los civiles.