Un 6% menos de asesinatos desde la aprobación de la Ley Integral

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La lucha contra la violencia hacia la mujer parece dar sus primeros frutos, según los datos que ha hecho públicos el gobierno central a través de su delegado contra la Violencia de Género, Miguel Lorente. El portavoz ha explicado que los homicidios de mujeres a manos de sus parejas o ex parejas han descendido más del 6% desde que se aprobó la Ley Integral de Medidas contra esta lacra social, en 2004, por lo que a su juicio, la norma es eficaz.

Lorente ha avanzado que el Observatorio Estatal de Violencia de Género ha concluido en su informe sobre los homicidios registrados el año pasado y ha encontrado “cinco concentraciones” de crímenes, la cifra más alta desde que hay estadísticas.

Durante estos cinco momentos del año, que el delegado no precisó, se produjeron 25 crímenes más que en los meses más duros de 2009. Por contra, durante los meses en los que se registraron menos homicidios que un año antes, la diferencia fue de ocho casos.

Lorente también ha defendido la Ley Integral y ha destacado que es la sociedad quien puede acabar con este fenómeno, y no “ninguna ley ni ningún gobierno”. A su juicio, si la norma no se hubiese puesto en marcha, hoy se contarían “más de un centenar” de homicidios de mujeres cada año, ya que gracias a la Ley Integral, “más de 95.000 mujeres tienen una medida de protección” y “más de 5.000 hombres” maltratadores o asesinos están encarcelados, 2.000 de ellos exclusivamente por delitos de violencia de género.

Críticas a Pajín

Sin embargo, pese a este alentador balance que hace el gobierno, el principal partido de la oposición, el Partido Popular (PP), ha cuestionado la postura de la actual ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, con respecto a este problema.

Así, la portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha anunciado que su partido preguntará a Pajín en qué consiste su “firme compromiso” en la lucha contra la violencia de género, durante el primer pleno del Congreso del año, que se celebrará la próxima semana.

Además, Sáenz de Santamaría ha subrayado que el inicio de 2011 “tampoco ha sido bueno” en materia de violencia de género, por lo que el PP asiste “con mucha preocupación” ante las cifras registradas de mujeres asesinadas en el año 2010, que el Centro Reina Sofía para el Estudio de la Violencia cifra en 75 víctimas.

“Queremos trabajar y ver su compromiso para que se adopten medidas y reformas de todo tipo, tanto legales como de seguridad y ejecutivas para proteger a las mujeres y a los niños, que también son víctimas de violencia de género, aunque no lo contemple la ley, para conseguir que las cifras de 2010 no se repitan”, ha argumentado Sáenz de Santamaría.

El fenómeno visto por la sociedad

Mientras el debate político gira de nuevo en torno a este tema, el 84,2 % de los españoles considera que los medios de comunicación son “el canal fundamental” de la información sobre violencia de género y cree que las noticias sobre crímenes son “demasiado sensacionalistas” y no deberían incluir descripciones detalladas sobre el modus operandi ni contar si el asesino se ha suicidado, algo que consideran “no relevante”.

Así lo revela la encuesta ofrecida en el manual Cómo informar sobre violencia contra la mujer en las relaciones de pareja, un trabajo editado por el Centro Reina Sofía de Estudio de la Violencia dirigido por el periodista Javier Fernández Arribas, realizado por la también periodista Myriam Noblejas.

El estudio refleja que siete de cada diez ciudadanos se informan sobre violencia de género en televisión y, aunque un 84,7 % considera que es el medio “más efectivo” para luchar contra esta lacra social, un porcentaje similar piensa que se trata del medio de comunicación “que trata la violencia de género de forma más sensacionalista”.

Entre los aspectos que, a juicio de los ciudadanos, se “deberían evitar” a la hora de ofrecer estas informaciones, un 72,8 % señaló “los detalles morbosos acerca de crímenes o agresiones” y el 59,1 % apuntó a “las justificaciones de los actos del agresor” relacionándolos con “traumas infantiles, enfermedades o adicciones”.

Además, casi nueve de cada diez encuestados consideran que “no es correcto” dar datos que identifiquen a la víctima, aunque para el 73,9 % sí lo es facilitar este tipo de información sobre el agresor, “especialmente para que toda la sociedad sepa quién es”, según el estudio.

En cuanto a la percepción en sí de la violencia de género, un 27,8 % de los encuestados se refieren a ella como violencia doméstica, confundiendo así dos tipologías criminales diferentes. Para los ciudadanos, se trata de un fenómeno “inaceptable” (90,6%) que está “extendido en España” (87,9%) y que “no se está reduciendo” (81,2%).

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