Zapatero se mantiene firme en la salida de Afganistán

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido que las tropas de la OTAN intenten mantener los plazos de salida de Afganistán -que se van a fijar de forma general para finales de 2014 -siempre y cuando quede garantizado que el país cumple con los objetivos de “seguridad” y “desarrollo” que motivaron esa presencia.

Así se ha pronunciado en su intervención ante los líderes de los otros 47 países con tropas en Afganistán reunidos en Lisboa con motivo de la 61 cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN, según ha informado un portavoz de Moncloa.

Zapatero ha subrayado que los objetivos de España en Afganistán son “irrenunciables” y ha destacado que en el proceso de transición que traspasará el control de la seguridad a los afganos y que la OTAN comenzará en 2011 “tan importantes” son los aspectos de la seguridad como los del desarrollo. “No vale dejar un país seguro sin capacidad de desarrollo”, ha indicado.

Ha reconocido que Afganistán es uno de los focos de riesgo para la seguridad colectiva, por eso es tan importante que la misión de la OTAN en ese país, ISAF, tenga éxito.

Les ha contado a sus socios aliados la visita que el pasado 6 de noviembre hizo a Afganistán, que le sirvió para llevarse una impresión “favorable” con respecto a la evolución de ese país y en la que los responsables locales con los que se reunió, entre ellos el presidente Hamid Karzai, le insistieron no sólo en las cuestiones de seguridad, sino en las necesidades de desarrollo de sus ciudadanos, que precisan de un mejor acceso al agua potable, así como hospitales y carreteras.

Zapatero ha recordado que el hospital de Qala-i-Now, capital de la provincia de Baghdis, que gestiona la cooperación española podrá ser transferido a los afganos “en breve”.

El presidente ha insistido en que el compromiso de España con el país asiático es “muy firme” y “se va a mantener” y ha abogado por desterrar la leyenda de que Afganistán nunca podrá ser una nación donde reine la democracia y el Estado de Derecho.

Dejar atrás ese mito sería “el mejor homenaje” a los soldados españoles y de la OTAN que han muerto sobre el terreno, pero también para las víctimas afganas, “cuyas vidas valen tanto como las de nuestros hombres”.

Los líderes de la OTAN reunidos en Lisboa se disponen a anunciar este sábado que el proceso de transición para transferir el control de la seguridad de Afganistán a las autoridades locales arrancará a principios de 2011, con el objetivo de que concluya a finales de 2014, tal y como ha solicitado el presidente Karzai, que participa en la cumbre.