Las mujeres vuelven al Ejército en Afganistán

Las mujeres en Afganistán van, poco a poco, superando barreras hacia la igualdad. El Ejército afgano no había tenido mujeres en sus filas desde los años ochenta hasta ahora, cuando han sido reclutadas 29 nuevas militares para realizar, principalmente, labores administrativas. Este es un pequeño paso hacia delante en la igualdad de género en el país centroasiático.

Esta nueva incorporación de mujeres a la fuerzas militares entra dentro de la intención de ampliar el Ejército, la Policía y otros cuerpos de seguridad afganos, para que las fuerzas internacionales puedan abandonar el país progresivamente. Así, la OTAN, Estados Unidos y el presidente afgano, Hamid Karzai, tienen proyectada dicha ampliación para que estos cuerpos de seguridad sean los responsables de la seguridad nacional.

En concreto, las fuerzas de seguridad afgana tienen actualmente unos 300.000 efectivos que cuentan con la ayuda de los aproximadamente 150.000 militares extranjeros desplegados en el país centroasiático.

Las 29 mujeres se dedicarán a labores administrativas y, por tanto, no combatirán en el frente a la insurgencia, que se encuentra en su mejor momento desde que en 2001 se derrocara el régimen talibán.

Tras la ceremonia de graduación en el Centro de Entrenamiento del Ejército en Kabul, Mari Sharifi, una de las nuevas mujeres militares declaró “estoy plenamente comprometida a servir a mi país de la misma manera en que sirven mis hermanos afganos en el Ejército. Por eso decidí alistarme”.

Por su parte, el comandante del Centro de Entrenamiento del Ejército, el general británico David Peterson aseguró que las nuevas reclutas son entusiastas y buenas soldados, también manifestó que “entran en el Ejército Nacional afgano con gran entusiasmo, y creo que hoy se ha podido ver un despliegue muy profesional, y ése es el resultado final”.

La última vez que Afganistán tuvo mujeres en sus filas militares fue en los años ochenta, durante el régimen apoyado por la Unión Soviética. No obstante, en la guerra civil que siguió poco después, se retiraron del servicio militar y luego, los talibanes en el poder prohibieron que volviesen a alistarse.