El huracán Earl se intensifica y se acerca a Carolina del Norte
El nuevo huracán que azota Estados Unidos (EEUU), se llama Earl y según la escala de Saffir-Simpson es un huracán de cuarta categoría, una de las más violentas. Tras pasar por Puerto Rico y las islas del noreste del Caribe provocando fuertes vientos, lluvias y olas, el fenómeno metereológico se dirige a Carolina del Norte donde podrían realizarse evacuaciones, según ha declarado el responsable de la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA).
Según ha informado el Centro Nacional de Huracanes de EEUU, Carolina del Norte se encuentra en alerta por la proximidad del huracán. Este aviso recae sobre los residentes de las localidades de Surf City y Duck ya que podrían sufrir en las próximas 48 horas condiciones climatológicas propias del huracán, entre ellas vientos de 119 kilómetros por hora.
El director del Centro, Bill Read, ha reconocido en rueda de prensa que cualquier desviación en la trayectoria de la tormenta hacia el oeste supondría una amenaza para zonas de costa . “Un pequeño error de cien millas en la dirección equivocada podría provocar un impacto diferente”, ha explicado Read, en alusión a potenciales evacuaciones. El responsable de la FEMA, Craig Fugate, también ha alertado de posibles evacuaciones en zonas pobladas, aunque al igual que Read lo enmarcó en un hipotético cambio de rumbo del huracán.
A las 17:00 horas (hora peninsular en España) de ayer, el huracán se encontraba 335 kilómetros al este de la isla Gran Turca, perteneciente al archipiélago británico de Turcas y Caicos y a 1.725 kilómetros al sur-sureste del cabo Hatteras, en Carolina del Norte.
Earl ha llegado a soplar con vientos máximos sostenidos de 215 kilómetros por hora y los meteorólogos calculan que no llegará a alcanzar, por escaso margen, la quinta categoría en la escala de Saffir-Simpson que es la máxima.
El gobernador de Puerto Rico, Luis Fortuno, ha declarado que el archipiélago había sido “bastante afortunado”, ya que no recibió un “impacto directo” de Earl. En este sentido, subrayó que su paso por la zona “no fue tan grave como podía haber sido”.
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