No sufras a cuenta

El otro día oí esta frase que por lo visto se empleaba mucho en una de esas innumerables empresas que andan atravesando serias dificultades y cuyo futuro se presenta de lo más incierto. La frase me gustó mucho porque encierra una gran filosofía. Nos amargamos nuestra existencia pensando en ese futuro que en nuestra imaginación siempre se presenta mucho peor que lo que al final resultará en la realidad.

La imaginación siempre es mucho más fuerte que la realidad, si comenzamos a ver fantasmas los vemos, como en las pesadillas, sin que nosotros podamos actuar. El día que perdí a un hijo no derramé ninguna lágrima, Sin embargo, viendo la película Campeón, me hinché de llorar. ¿Por qué semejante disparate? Cuando perdí a mi hijo tenía que estar preocupándome de mi mujer y de mis otros dos hijos, el presente inmediato hacía que no tuviese tiempo para lamentaciones.

Sin embargo en el cine te encuentras indefenso y te llevan a una situación que te hacen sentirte impotente para poder aplicar ningún remedio. Por eso insisto, hay que ser previsor respecto del futuro, pero dentro de un orden, sin darle más vueltas que las necesaria. Yo tenía un cuñado, muy inteligente, que utilizaba mucho la expresión “No manosees el tema”. Y es cierto, la gente se hincha de manosear los temas, es decir da vueltas y vueltas sobre lo mismo, sin pretender en ningún momento llegar a alguna conclusión, simplemente repiten y repiten los mismos argumentos y sobre todo si estos son negativos solo sirven para que esas personas terminen hundidas en la miseria.