Activistas de la Flotilla de la Libertad presentan una querella contra el Gobierno israelí

Tres de los activistas que el pasado mes de mayo viajaron a la Franja de Gaza en la conocida como Flotilla de la Libertad, Manuel Tapial, Laura Arau y David Segarra, han presentado esta mañana en la Audiencia Nacional española una querella contra siete miembros del Gobierno israelí y un alto militar. Se les acusa de crímenes de guerra y contra la humanidad por los ataques que sufrieron los tripulantes de la embarcación cuando intentaban hacer llegar un cargamento de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.

Igualmente, han anunciado que están pensando poner en marcha la campaña Rumbo a Gaza, con la que enviarán dos barcos con bandera española a la Franja con ayuda humanitaria. La operación sólo se vería interrumpida si el embargo sobre Gaza se levantara pues, según palabras de Tapial, desde la Asociación Cultura Paz y Solidaridad a la que pertenece, quieren “seguir trabajando en la solidaridad con el pueblo palestino”.

En sus declaraciones, los tres activistas han aprovechado para criticar la inacción del Gobierno español ante los ataques que se produjeron contra la Flotilla de la Libertad, causando nueve muertos. Según Tapial, el hecho de que tres españoles fueran victimas en un ataque en aguas internacionales sería justificación “más que de sobra para que el Estado hubiera intervenido”.

La querella está dirigida en un principio contra el jefe del Gobierno de Israel, Benjamín Netanyahu, y los ministros de Defensa, Exteriores, Inteligencia y Asuntos Atómicos, Asuntos Estratégicos, Interior, un ministro sin cartera y un alto militar. Sin embargo, uno de los abogados que ha redactado la querella, Enrique Santiago, ha declarado que no se descarta incluir a más responsables del ataque a medida que las investigaciones vayan avanzando.

Esta noticia coincide con la decisión del Gobierno israelí de liberar tres barcos de origen turco que llevaban ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. Éstos habían sido secuestrados hace dos meses tras su resistencia a que fuera el propio Israel quien llevara la ayuda a Gaza. Tras varias negociaciones con Turquía, el primer ministro israelí, el ministro de Defensa y el ministro de Asuntos Exteriores han accedido a que tres remolcadores turcos acudan a Israel a recoger los barcos secuestrados.