Obama insiste en las sanciones

Rioja2

0

Era de esperar que el acuerdo alcanzado en materia de energía nuclear entre Brasil, Turquía e Irán no gustase a Estados Unidos. El gobierno estadounidense lleva tiempo insistiendo en la necesidad de imponer sanciones contra el régimen iraní por su programa nuclear y por no atender a las resoluciones de Naciones Unidas y el reciente acuerdo no parece haber hecho cambiar de idea a la Administración Obama.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le comunicó este miércoles al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que su Gobierno seguirá trabajando a favor de la imposición de nuevas sanciones internacionales contra Irán a cuenta de su polémico programa nuclear, afirmando además que el reciente anuncio de Irán, que dio su consentimiento para que el enriquecimiento de su uranio se haga en un tercer país, Turquía, no sirve para “construir [puentes de] confianza”, informa la Casa Blanca.

“El presidente hizo hincapié en las continuas y significativas preocupaciones de la comunidad internacional sobre el conjunto del programa militar iraní”, afirmó la Casa Blanca en un comunicado en que ofrecía un resumen entre una conversación telefónica mantenida entre Obama y Erdogan.

La Administración Obama hizo público el pasado martes el borrador de las nuevas resoluciones contra Irán acordado por los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Se trata de una iniciativa que se desveló después de que los Gobierno de Turquía y Brasil anunciaran que habían llegado a un acuerdo con Irán para que su uranio poco enriquecido fuera enviado a Turquía para su mayor enriquecimiento, accediendo de este modo a una antigua propuesta planteada a Teherán por parte de la comunidad internacional.

Sin embargo, Brasil se ha mostrado absolutamente contrario a la imposición de sanciones a Irán. El ministro brasileño de Exteriores, Celso Amorim, ha asegurado que ignorar el acuerdo para el intercambio de combustible nuclear (alcanzado entre su país, Turquía e Irán) sería despreciar la posibilidad de solucionar pacíficamente el conflicto originado por el programa atómico de Teherán.

A su regreso de la capital iraní, Amorim defendió en rueda de prensa el acuerdo como “un primer paso” de entendimiento con el que se puede persuadir a Irán para que deje de enriquecer uranio. El ministro añadió que el acuerdo puede generar “avances significativos” en el pulso que mantienen algunas potencias occidentales con Irán y dijo que ignorarlo sería despreciar una oportunidad de solucionar el conflicto de forma pacífica.

Por ello, cuestionó la eficacia de las sanciones económicas contra Teherán por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, ya que Brasil entiende que la imposición de una nueva ronda de sanciones puede llevar a Irán a atrincherarse. “Ésta es la primera vez que Irán aceptó una propuesta por escrito y sin cuestionamientos”, señaló Amorim. “Todos los temas que fueron considerados esenciales para este acuerdo de canje de uranio, que fue visto como el puente a una solución pacífica y negociada, fueron cumplidos”, agregó.

“Tenemos la oportunidad de lograr una solución pacífica y negociada. Aquellos que dejen pasar esa oportunidad o que piensen que las sanciones u otras medidas pueden llevarnos más cerca de la solución, tendrán que hacerse responsables de las consecuencias”

, señaló el ministro brasileño.

Esta postura de Brasil ha sido presentada, junto a Turquía, al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en una carta conjunta firmada también por Irán para pedir una última oportunidad de negociación para la República Islámica.

Incidente UE-Rusia

Por otro lado, la detención por parte de Alemania de varios hombres acusados de comprar tecnología para un reactor nuclear iraní de fabricación rusa amenaza con provocar un grave incidente diplomático entre la Unión Europea y Rusia, según fuentes diplomáticas occidentales.

Estas fuentes afirman que la noticia ha enfurecido a Moscú, que se ha quejado en el comité de la ONU encargado de determinar las sanciones contra Irán por su polémico programa nuclear.

Según un diplomático europeo que habló bajo condición de anonimato, un grupo de hombres fue arrestado en un aeropuerto alemán por parte de la Policía de fronteras acusados de violar la prohibición de exportar a Irán tecnología sensible “de doble uso”.

Los detenidos son ciudadanos alemanes, que trabajan además para una empresa germana, aunque evitó dar detalles acerca del nombre de la firma, del número de arrestados o del tipo de tecnología que portaban, cuyo destino era el reactor nuclear iraní de Bushehr, que se espera entre en funcionamiento este mes de agosto. Supuestamente estos empresarios alemanes actuaban en nombre de intereses rusos e iraníes.

Pese a que las sanciones internacionales aprobadas contra Irán en 2006 no prohíben las exportaciones de tecnologías a reactores de agua ligera, como el de Busher, la legislación de la UE sí lo hace, lo que explica las detenciones practicadas por la Policía alemana.

Este incidente parece evidenciar las profundas diferencias que existen con respecto a Irán y su programa atómico entre las grandes potencias mundiales. Así, mientras países como Rusia y China continúan haciendo negocios con Irán pese a que en breve se podría aprobar la cuarta ronda de sanciones contra Teherán, los países occidentales son mucho más restrictos en lo que se refiere al aislamiento comercial de la República Islámica.

Etiquetas
stats