La zona de esparcimiento canino pretende dar solución a 10.000 mascotas de Logroño

La semana pasada el Ayuntamiento de Logroño anunció la próxima remodelación del Parque de los Enamorados de la ciudad . En ella, además de una zona deportiva y de entretenimiento para niños, habrá un cercado de 1.500 metros cuadrados en el que se podrá soltar a los perros durante las 24 horas del día.

Actualmente tan sólo hay dos zonas en la ciudad en las que los canes pude permanecer sin correa durante todo el día, el Soto inundable del Ebro y el Pozo Cubillas. En el resto de parques y zonas verdes de Logroño existen unos horarios que, en ocasiones, no son respetados por los ciudanos.

Para dar solución a los conflictos existentes entre los ciudadanos y los controladores de parques que luchan porque se cumpla la normativa, el Ayuntamiento de Logroño ha decidido crear un recinto cerrado para que los perros campen en libertad.

Concepción Arribas, concejal de Medio Ambiente de la ciudad, afirma que se ha tomado esta iniciativa con el fin de dar solución a una petición ciudadana que se venía solicitando desde hace tiempo. “Al urbanizar la zona del Pozo Cubillas, uno de los lugares donde se podían soltar los perros, y con las crecidas del Ebro que hemos tenido este año, en la zona inundable se hacía imposible soltar a los perros. Nosotros entendemos que los animales necesitan salir a

correr, por esta razón vimos en el Parque de los Enamorados una posibilidad para crear una zona de esparcimiento canino“. ”Realizar una zona de esparcimiento en los parques de la ciudad era imposible, así que pensamos hacerle un hueco en el Parque de los Enamorados“, asegura Concepción.

“No se trata sólo de una zona vallada, los perros van a tener juguetes y van a poder correr. No es ni grande ni pequeña, yo creo que el tamaño está bien”, afirma la concejal de Medio Ambiente. “De la limpieza se van a ocupar los servicios municipales, aunque confiamos en que los dueños de los perros recojan los excrementos y la mantengan limpia”.

“Lo que quieren muchos es tener una zona de esparcimiento justo debajo de su casa y eso es lo que no se puede hacer”, asegura Concha Arribas. “Los parques de Logroño están concebidos para las personas”, sentencia.

Según Concepción Arribas, en Logroño hay alrededor de 10.000 perros. Esta zona acotada de 1.500 metros cuadrados pretende dar solución a un problema que tienen muchos dueños de estas mascotas. Sin embargo, pese a que la iniciativa la consideran acertada, creen que todavía queda mucho por hacer.

LA PROTECTORA DE ANIMALES

Carmen Faulín, presidenta de la Asociación Protectora de Animales de La Rioja , aplaude la iniciativa que ha tomado el Ayuntamiento de crear una zona de esparcimiento canino. Según Carmen, es algo que venían solicitando desde hace muchos años y que considera importante y esencial para las mascotas. “Es lógico que exista un sitio donde se puedan soltar los perros a cualquier hora. Además, la gente que vaya sin perro no tiene por qué quejarse porque ya saben que van a una zona en la que los perros pueden estar sueltos”, afirma Carmen Faulín.

“Me parece una buena noticia porque estamos luchando hace muchos años por ello, además el que esté acotado me parece una idea estupenda, no se van a salir de los límites, no van a molestar, no van a salir a la carretera. No veíamos que alguna vez no fuesen a decir que sí. Es un primer paso, sí, pero esperamos que haya más pasos y que haya más opciones”, afirma la presidenta de la Protectora.

“1.500 metros cuadrados es un buen espacio si hubiese más espacios. Como lugar único, es muy limitado, debería haber más espacios de estas dimensiones. Además, no creo que solucione demasiado, llegará a los ciudadanos que lo tengan muy cerca, que realmente son los que lo van a utilizar; también habrá gente que coja el coche y vayan hasta allí, pero serán los que menos”, asegura Carmen.

“Es un primer paso pero no es suficiente”, sentencia, “es muy importante que se armonice la convivencia entre la gente que tiene perro y la que no lo tiene. Tener animales es bueno, saludable y está bien, y tenemos que procurar que causen las menos molestias posibles”.

JOSÉ MANUEL, WEBMASTER ZONAS DE ESPARCIMIENTO CANINO

José Manuel es dueño de un perro y webmaster de una página creada para recoger las dudas y sugerencias de todos aquellos ciudadanos interesados en la creación de zonas de esparcimiento canino. “La página la he hecho para que los dueños de los perros demos nuestra opinión. He puesto una serie de sitios por donde yo me muevo y donde se podrían poner estas zonas, pero lo que hace falta es que cada uno refleje su problema”, asegura José Manuel.

“En Pamplona hay 17 zonas libres. Son parques inmensos, no zonas acotadas. Se puede

pasear al perro siempre teniendo cuidado de que no moleste a nadie. Pero aquí parece que hay una especie de “persecución” con los dueños de los perros. También hay que pensar en que yo me puedo ir con el coche, pero hay gente mayor que donde baja es al parque de al lado de su casa“, afirma José Manuel, personas que no van a poder desplazarse hasta la zona en la que se ubicará esta zona de esparcimiento canino.

En cuanto a las dimensiones de la zona de esparcimiento que se va a crear en el Parque de los Enamorados, José Manuel considera que es pequeña, “es una ridiculez, si se trata de esparcimiento es para que los perros puedan correr, y esa zona es como una guardería de niños, para decir 'lo meto en el corro este y que juegue'.”

“En el Ayuntamiento me han dicho que es una zona experimental,y que van a ver cómo se desarrolla. Pero si es una zona experimental pequeña, en la cual se va a producir un foco de peleas de perros, en la que la gente no va a recoger las cacas, entonces dirán 'ves como no ha resultado el área canina', o si la gente no va porque les pilla lejos dirán 'ves como no se utiliza aunque la hayamos puesto'”, sentencia José Manuel.

PROPIETARIOS DE PERROS

Luis, dueño de una perrita llamada Sira, se queja de la lejanía de la zona establecida. En su opinión, los ciudadanos que viven en el centro de Logroño necesitan más de veinte minutos para desplazarse hasta la zona de esparcimiento canino habilitada por el Ayuntamiento. “Si tengo que coger el coche para poder ir hasta allí, prefiero irme hasta el Parque de la Grajera y pasear allí con mi perra”, afirma este dueño indignado.

Alfonso, acompañado de su perro Rufo, opina que la zona acotada es excesivamente pequeña, “son 1.500 metros cuadrados, vamos, unos 40 metros

de largo por otros 40 de ancho. Parece más el patio de una cárcel que una zona para que los perros puedan correr. He visto los planos y, teniendo en cuenta las dimensiones del parque, me parece excesivamente pequeña la zona que se ha decidido“. ”Nos tratan como apestados, nos llevan al culo de la ciudad para que podamos disfrutar con nuestras mascotas“, afirma el dueño de Rufo.

María, junto a su compañero Scotty, considera que esta no es la solución que se pedía. “Yo creo que así lo único que solucionan es que los que viven por Valdegastea puedan soltar a sus perros libremente. En mi opinión, deberían habilitar zonas valladas, aunque sean más pequeñas, en los parques del centro de la ciudad. Una señora de setenta años que tenga un perrito no va a desplazarse hasta el Parque de los Enamorados para soltarlo. Esto sólo soluciona a algunos el problema, no a todos los dueños de perros”.

“Aunque me parece un recinto pequeño, creo que es un buen

comienzo. Vivo cerca de la zona y por fin podré tener un lugar digno para soltar a mi perrita“, afirma Alicia, dueña de Chepi. ”Antes la llevaba al soto inundable, pero es vergonzosa la suciedad que hay en la zona. De esta forma cumpliremos con la normativa y estaremos contentos los dueños y los controladores.“

Diego, junto a su mascota Buffy, opina que es pequeña, escasa y que está demasiado lejos para el 90% de los perros que habitan en la ciudad. “Los animales también tienen derechos y el Ayuntamiento podría poner de su parte para que los propietarios cumplamos los derechos de los animales, respetando la normativa de la ciudad. Yo que vivo en el centro no puedo coger todos los días el coche para poder soltar a mi perro. Parece que pretenden convertir Logroño en la primera ciudad sin animales de compañía, sólo tienen derechos las personas que no tienen animales.”