Nigeria debe investigar las causas de los últimos ataques
La organización pro derechos humanos, Human Right Watch (HRW), pide a Goodluck Jonathan, presidente en funciones de Nigeria, que investigue detalladamente la “masacre” que se produjo el pasado domingo en el estado de Plateau, en la que hubo 200 víctimas mortales. Además, HRW exige que los culpables de dichos ataques sean procesados judicialmente.
La organización pide también al presidente nigeriano en funciones que el Ejército y la Policía del país protejan a todos los civiles, independientemente de su etnia o religión.
El sangriento ataque del pasado domingo termino con la vida de 200 personas en una aldea del estado de Plateau, y fue perpetrado por los Hausa Fulani (etnia mayoritariamente musulmana muy numerosa en Nigeria) en un pueblo de mayoría cristiana. En declaraciones de Dan Manjang, consejero del gobernador de estado de la región a la agencia SAPA, tras esta tragedia se suman ya 500 víctimas por enfrentamientos sectarios en el país.
“Este tipo de violencia terrible ha dejado a miles de personas muertas en la última década, pero nadie ha sido responsabilizado por esto”, afirmó la investigadora para África Occidental de HRW, Corinne Dufka. “Es hora de poner un límite. Las autoridades necesitan proteger a estas comunidades, llevar a los autores ante la Justicia y afrontar las causas que originan esta violencia”, añadió.
Después de esta crisis, Jonathan prometió llevar a los autores ante la Justicia. “Aquellos que hayan sido encontrados culpable de haber ideado, animado o avivado las brasas de esta crisis a través de sus acciones o pronunciamientos serán arrestados y juzgados”, aseguró. La Policía nigeriana afirma haber detenido, de momento, a 98 personas por estar relacionadas con el suceso.
“No permitiremos que nadie se esconda bajo la excusa de la acción de un grupo para evadir la Justicia. Un delito es una responsabilidad individual, no un asunto de comunidad”, indicó Jonathan . A pesar de que las medidas tomadas por el presidente en funciones son “un paso en la dirección adecuada”, afirma HRW, este proceso debería ser seguido por una investigación creíble y realizar los juicios oportunos, defiende la organización.
Estos brotes violentos vienen siendo habituales en el estado de Plateau, donde se suceden desde hace al menos una década los enfrentamientos entre católicos y musulmanes. Estas confrontaciones han causado desde 1999, cuando se implantó en Nigeria la ley islámica o Sharia, más de 12.000 víctimas mortales en Nigeria.
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