La Policía Local se incorpora al Sistema de Seguimiento de las Víctimas de Violencia de Género

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El delegado del Gobierno en La Rioja y el alcalde de Logroño han firmado un acuerdo que permitirá a la Policía de Logroño acceder al Sistema de Seguimiento Integral de las Víctimas de Violencia de Género.

Aunque la Policía Local ya realizaba las mismas tareas que la Policía Nacional en este asunto, el acceso a esta herramienta permite a la Policía de Logroño tener información sobre las 140.000 víctimas que en toda España están integradas en este sistema. De ellas, 1.014 víctimas corresponden a nuestra comunidad.

José Antonio Ulecia ha destacado la importancia de que este sistema sea a nivel nacional, puesto que en muchos casos a las víctimas se les facilita trabajo o casa de acogida en otra localidad por su seguridad. También tiene su importancia para el seguimiento de los agresores, que muchas veces tienen órdenes de alejamiento.

A esta aplicación están conectados cerca de 30.000 usuarios, entre cuerpos policiales, Instituciones Penitenciarias, fiscales, unidades de coordinación y de violencia sobre la mujer y la Delegación del Gobierno para la violencia de género. A través de este sistema se han realizado 414.713 valoraciones de riesgo, de ellas 4.838 en La Rioja.

Logroño, después de Asturias, es el segundo lugar donde se pone en marcha este sistema también para la Policía Local. La Secretaría de Estado de Seguridad ha formado a los nuevos usuarios del sistema para que conozcan su contenido y funcionamiento. Esta inciativa se pretende hacer extensible paulativamente a más ayuntamientos. Los próximos municipios que se incorporarán a esta red serán Córdoba y Sevilla.

VALORACIÓN DE RIESGO

La valoración de riesgo de la víctima de violencia de género se realiza a través de esta herramienta construida a partir de 40.000 casos reales y validada por un equipo de catedráticos universitarios y especialistas de la Policía Nacional, la Guardia Civil e Instituciones Penitenciarias.

Con ella, los especialistas policiales determinan el riesgo de la víctima de sufrir una agresión, diferenciado en cuatro niveles: extremo, alto, medio y bajo. Estos niveles se revisan de forma periódica, a las 72 horas (en el caso de extremo), 7 días (alto), 30 días (medio) y 60 días (bajo). También cuando lo disponga la autoridad judicial o el fiscal o existan nuevas circunstancias que afecten a la víctima o al agresor.

Estas valoraciones de riesgo se incorporan al atestado policial, se comunican a la autoridad judicial y al fiscal y generan una serie de avisos

(sobre cualquier circunstancia relacionada con la tramitación de cada caso), alertas (sobre una nueva situación que pueda elevar el nivel de riesgo de la víctima) y alarmas ( sobre la inminencia de una situación grave para la seguridad de la víctima).