La (más que nunca empinada) cuesta de enero

“Hay que apretarse el cinturón” asegura una señora que arrastra un carrito de la compra a su salida del Mercado de Abastos de Logroño. Aunque es complicado seguir esta doctrina cuando al cinturón ya no le quedan más agujeros. Así se sienten miles de personas cuando se sientan en casa, calculadora en mano, para echar cuentas, una cuentas que ya no salen. 2010 acaba de empezar y lo hace con la cara más dura de una crisis económica que sigue cercenando la economía de las clases medias y trabajadoras porque son ellas las más afectadas por la subida de impuestos y del precio de la vida.

La temida cuesta de enero será a partir de febrero más empinada que nunca. Será entonces cuando notemos que ha aumentado la retención del IRPF en nuestras nóminas, que la factura de la luz es más elevada, que nos cuesta más una botella de gas butano, que pagaremos por el transporte público y que el IPC que nos había dado un respiro durante todo el año cerró diciembre con un 0,1% en La Rioja, es poco, pero menos es nada.

Por no hablar de los fumadores que la semana pasada pagaron 15 céntimos más por su cajetilla de tabaco de la marca Philip Morris: es decir, un consumidor de tabaco marca Marlboro abonará 3,60 euros por 20 cigarros.

SUBE EL GAS BUTANO, LOS TRANSPORTES Y LA LUZ, LO DEMÁS SE MANTIENE

A finales de 2009, el Gobierno central anunciaba que el nuevo año se inauguraba con una subida del precio de algunos servicios básicos como la electricidad o el gas butano. La tarifa riojana pagaba el año pasado una media de 60 euros al mes de tarifa de luz, a partir del recibe de enero la factura se incrementa en un 1,58 euros lo que al año representa casi 20 euros de más.

Sin embargo, la nueva normativa del Gobierno establece un bono social destinado a pensionistas mayores de 60 años que cobren pensiones mínimas o a aquellas personas propietarias de primeras residencias con potencias instaladas iguales o inferiores a los 3 kilovatios.

En cuanto al gas, la factura del gas natural da un respiro a sus usuarios ya que permanece invariable en su revisión trimestral. No así para los que utilizan gas butano porque el precio de la bombona se incrementa un 3,36%, es decir, un 0,36% para un envase de 12,5 kilos/gas, con lo que pasará a costar 11,05%. Sube también el transporte público: los billetes de renfe aumentan un 4% para los de Alta Velocidad y trayectos de larga distancia y un 6% para los trenes de Cercanías.

ADIOS A LOS 400 EUROS Y EN VERANO SUBE EL IVA

Era una medida prometida en campaña electoral de 2008 y que Zapatero se apresuró a decretar cuando ocupó la Moncloa en su segunda legislatura. A las rentas con base imponible superior a los 12.000 anuales se les deducía 400 euros al año del pago del IRPF mensual, una medida dirigida a la clase media y a los mileuristas. Sin embargo, la crisis económica y la bajada de cotizaciones a la Seguridad Social y el aumento del número de parados han obligado al Gobierno a acometer una reforma legislativa que suprime esa deducción a la espera de devolver a las arcas públicas unos 5.700 millones de euros. El aumento de la presión fiscal lo soportarán, de la misma manera que se vio aliviada con la deducción, la clase media, los trabajadores con rentas más ajustadas que verán mermado su poder adquisitivo.

Pero la reforma fiscal más agresiva tendrá lugar en el verano. Es cuando el Gobierno empezará a aplicar la subida del IVA a partir del 1 de julio del 16% al 18% en el tipo general y del 7% al 8% en el reducido que grava, por ejemplo, la vivienda y la hostelería. Es decir, comprar un piso saldrá más caro al igual que tomar un pincho en un bar. El tipo del 4% que se aplica a productos básicos como los alimentos, se mantiene intacto.

Sin 2009 será recordado por ser el año de la crisis, 2010 podría convertirse en aquel año en el que subir la cuesta de enero nos costó los 12 meses del año.