El C.D. Logroñés hizo historia

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Hace veinte temporadas, en la liga 1989-1990, el CD Logroñés consiguió su mejor clasificación en primera división. En aquel campeonato el equipo blanquirrojo, con José Luis Romero de entrenador, terminó el séptima posición y llegó a la última jornada con opciones de clasificarse para la Copa de la UEFA, que el gran sueño del presidente del club, Marcos Eguizábal.

Sólo los grandes del fútbol español y la Real Sociedad, que se hizo un hueco entre Real Madrid, Valencia, Barcelona, Atlético de Madrid y Sevilla, superaron en la clasificación final al Logroñés, que ganó 18 partidos, empató 5 y perdió 15. Con sus 41 puntos fue séptimo.

Para conseguir una plaza para la Copa de la UEFA de la temporada siguiente, el Logroñés tenía que ganar en la última jornada en Valencia y esperar que la Real Sociedad no lo hiciera en Sevilla. Pero, el equipo riojano perdió 4-0 en el Luís Casanova y el equipo vasco venció 0-1 en el Sánchez Pizjuán. Nunca antes, ni después, estuvo el Logroñés tan cerca de meterse en una competición europea.

El entrenador tuvo una plantilla variopinta, con jugadores de gran experiencia y calidad, como los internacionales Quique Setién, Manolo Sarabia, Salva y Marcos Alonso, que llegaron a Logroño con “todo hecho” en el fútbol, y jóvenes promesas, sobre todo de la por entonces prolífica cantera del Real Madrid. En la plantilla hubo cinco jugadores cedidos por el Real Madrid –Maqueda, Aragón, Rosagro, Vílchez y José María- y cuatro cedidos por el Barcelona –Angoy, Salva, Cristóbal y Linde-.

Además, hubo jugadores de “casa” –el capitán Nacho Martín, Moreno e Iñaki Hurtado- y futbolistas que llevaban varias temporadas en el club: López Pérez y Sánchez Lorenzo, que habían ascendido con el equipo a primera división, Herrero, Adolfo y el internacional uruguayo Alzamendi.

A mitad de temporada el Logroñés se reforzó con el delantero Marcos Alonso- exjugador del Atlético de Madrid y FC Barcelona- y fichó también a un interior zurdo que estaba sin equipo: Pedro González, que se convirtió en el jugador revelación del equipo y que, incluso, vistió aquella misma temporada la camiseta de la selección española sub’21.

Hubo resultados sorprendentes, como la victoria 0-4 en Oviedo y el empate 3-3 en Bernabeu con el Real Madrid celebrando por entonces un nuevo título de campeón. Pero, también hubo derrotas dolorosas, como en Gijón frente al Sporting (5-1) y en Las Gaunas contra el Real Madrid (1-5) por jugarle de tú a tú a la “Quinta del Buitre”. El Real Madrid era un equipo intratable y poderoso, que aquella temporada conquistó su quinta liga consecutiva.

De aquel CD Logroñés no queda nada. El Campo Municipal de Las Gaunas fue derribado para construir un nuevo estadio, el presidente Marcos Eguizábal falleció el pasado mes de agosto a los 90 años de edad, el equipo no existe deportivamente y el club está pendiente de que los tribunales de justicia declaren su liquidación como sociedad anónima deportiva.

Los miles de socios que tuvo el equipo -hasta once mil en la época dorada del club- fueron desertando de las gradas mientras el equipo caía en picado.

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