Zelaya presenta sus dudas respecto a la resolución de la crisis

El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, advirtió que el Gobierno interino puede darle una “bofetada” a la comunidad internacional con motivo del debate este martes para resolver la crisis política desatada tras el golpe militar del 28 de junio, así como la restitución del mandatario.

“Será el día esencial del diálogo para saber si esto se resolverá, pero no tengo confianza. Considero que lo que va a pasar es que el régimen golpista se va a seguir negando a acatar la resolución de la OEA (Organización de Estados Americanos) y de la comunidad internacional”, dijo Zelaya en una entrevista recogida por los medios hondureños en la que recalcó su voluntad al diálogo con el gabinete del presidente 'de facto' Roberto Micheletti.

“Siempre mantengo mi actitud al diálogo, pero no tengo ninguna confianza en los golpistas. Va a ser una bofetada contra la comunidad internacional si se niegan a restituir lo que usurparon”, recalcó Zelaya.

Refugiado en la embajada de Brasil desde su regreso a Tegucigalpa hace tres semanas, el presidente depuesto dijo no poder adelantar cuál será su postura si fracasan las negociaciones, pero señaló que seguirán luchando en las calles y no descartó un empeoramiento de la crisis si no consiguien sus metas propuestas.

Los representantes de Zelaya y de Micheletti llegaron la semana pasada al consenso en unos cinco puntos del Acuerdo de San José, base de la negociación propuesta por el mandatario costarricense y mediador del conflicto, Óscar Arias, como la creación de un gobierno de unidad y el rechazo a una amnistía, pero dejaron para este martes el polémico tema de la restitución.

“Todo lo que hasta ahora se ha avanzado, lo hemos aceptado para concluir pacíficamente mi mandato -el 27 de enero-, pero el martes es decisivo, la comunidad internacional me está apoyando en darle una lección a los golpistas”, comentó el depuesto presidente, acusado por el Gobierno interino de 18 delitos, entre ellos corrupción, abuso de autoridad y traición a la patria. Así, añadió que los negociadores del Gobierno formado tras el golpe militar “están entreteniéndose en otros temas” para ganar tiempo mientras se aproximan las elecciones del 29 de noviembre, que según Micheletti, ganarán el reconocimiento internacional al verse como solución a la crisis.