El Naturhouse consigue su primera victoria en casa

Naturhouse La Rioja (17+19): Aguinagalde (p), Romero (7), Arrieta (3), Velasco, Tioumentsev (3), Sorrentino (1), Guardiola (5), Parra (1), Vigo (2), López (2), Amargant (2), Silva y Baskin (10, 2 de penalti).

Lábaro Toledo (14+18): Moyano (p), Martinovic (3), Lepp (2), Strazdas (5), Fernández (4, 1 de penalti), Barbón (1), Milasevic (2), Petkevicius (p, 1), Herrero (4, 1 de penalti), Plaza, Eitutis (5), Fuentes, Becerra (1) y Pérez (4, 1 de penalti).

Parciales: 2-3, 3-5, 5-6, 9-7, 12-11, 17-14 (descanso), 21-16, 23-20, 26-23, 30-24, 33-27 y 36-32 (final). Árbitros: García y Pastor (catalanes). Excluyeron a los locales Arrieta, Velasco (en dos ocasiones), Tioumentsev, Sorrentino, Guardiola, Amargant y Baskin; y a los visitantes Martinovic, Plaza, Lepp, Fernández y Barbón. Incidencias: Alrededor de 2.000 espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja.

NATURHOUSE LA RIOJA - LÁBARO TOLEDO, 36-32Así nos gusta ver al Naturhouse La Rioja.

Ganando, exhibiendo buen juego y sobre todo no haciéndonos sufrir en cada final de partido. El conjunto riojano jugó un encuentro ordenado a pesar de que tuvo un comienzo algo dubitativo ante el buen arranque del Lábaro Toledo.

El Naturhouse saltó al terreno de juego imponiendo su poderío en defensa pero con muchas imprecisiones en ataque. Algo que aprovechó el conjunto de Astrauskas para adelantarse en el marcador y poner nerviosos a los de Jota que salieron menos concentrados. Los árbitros volvieron a cobrar importancia una vez más y comenzaron dejando con cinco al conjunto local al señalar dos minutos a Tioumentsev. Jota mandaba salir a Velasco por error lo que propició otra sanción. Con cuatro jugadores en cancha, los locales supieron defender su portería y mantuvieron el tanteo a cero.

A partir de ese momento se crecieron los de Jota y se adelantaron en el marcador (7-6) por primera vez. Baskin se erigió en protagonista de esta primera parte consiguiendo ocho goles y dando moral a un conjunto que mostró sus mejores armas en defensa.

Al descanso se llegaba con un 17-14 a favor de los locales, que nunca más dejaron de ir por delante en el marcador. Hicieron uno de los mejores segundos tiempos hasta la fecha. El dominio del conjunto riojano fue absoluto destacando como claves de su juego el poderío en defensa y los contragolpes, muy bien definidos. El conjunto toledano por su parte mostró sus cartas pero sin ningún patrón definido aunque con mucho juego individual, lo que les permitiría acortar distancias, aunque ya sin tiempo para poder hacer nada.

La máxima diferencia se produjo en el 21' (32-24) y en ese momento parecía que todos querían ser protagonistas: Romero acabó con siete goles, Isaías con cinco y Arrieta con tres ,aunque los actores principales fueron, sin duda alguna, el ruso Baskin, que terminó el partido con diez goles, y el 'paralotodo' Gurutz Aguinagalde.

Finalmente, 36-32 reflejó el luminoso al término del encuentro. Dos puntos más para el casillero del conjunto riojano que, tras la derrota del Arrate, se aupa a la quinta posición.