Olavarrieta inaugura las Gaunas

U.D.Logroñés: Rubio; Izquierdo, Gibanel, Pepe, Arpón, Olavarrieta, Raúl Torres, Condeso (Cervero, m.64), Carreño(Popo m.74), Gaspar (Iñaki m.82), y Molina.

Terrassa F.C.:

Gerardo, Sierra, Idri, Zou, Carroza (Josua, m.85), Ramirez ( Cane, m.60), Yacob-Ba (Mario, m.69), Ramón, Flo, Ivan y David.

Colegiado: Asier Isturiz La Torre. Amarillas a los locaes Pepe y Gibanel y a los visitantes Zou, Flo e Ivan y roja directa a Zou, por derribo a Gaspar. Espectadores: 3.500.

U.D. LOGROÑÉS- TERRASA, 1-0

Parece que lo de jugar en sábado le da suerte al conjunto riojano. La Unión Deportiva Logroñés consiguió sin brillantez su primer triunfo en casa ante un flojo Terrasa que se quedó con diez en la segunda parte y amuralló su línea defensiva.

El partido tuvo dos partes bien diferentes. En la primera, la Unión presionó en todo el campo, con buenas jugadas de Carreño y Condesso en un mano a mano con el portero. Después sería el propio jugador portugués quien levantara al público de sus asientos con un lanzamiento desde la frontal del área grande con mucho peligro.

El juego lo controlaba el equipo local, con mucho toque en el centro del campo, aunque sigue siendo la asignatura pendiente de los de Visnijc, que vio el patido desde la grada por su expulsión en la pasada jornada. Pero los locales leyeron bien los primeros 45 minutos y tuvieron en ese tiempo las mejores ocasiones de gol.

Carreño de nuevo encaraba al portero pero el guardameta visitante lograba desbaratar la jugada. Los visitantes apenas acechaban la portería de Rubio. Si bien tres tiros bajo palos, que atajó el portero local sin mayor problema.

En la segunda la Unión conseguía marcar en el minuto 84, tras una buena jugada de Iñaki, que acababa de pisar el terreno de juego, recogía un balón en profundidad, encaraba al defensa y disparaba a portería. Gerardo rechazaba el lanzamiento y Olavarrieta, a puerta vacía, conseguía el primer gol en Las Gaunas.

Pero hasta ese momento apenas hubo ocasiones. Por señalar la expulsión de Zou por una entrada a Gaspar, siendo el defensa blanco el último hombre de campo. A partir de ese momento los locales fueron dueños y señores del partido.

Finalmente, una victoria sin brillantez pero que supone conseguir tres puntos celebrados por una nutrida afición que no se cansó de animar a su equipo a lo largo de los más de 90 minutos de juego.