Reporteros Sin Fronteras muestra su preocupación por la polarización en Venezuela

La rapidez con la que están actuando las autoridades venezolanas por las agresiones que el pasado 13 de agosto sufrieron doce periodistas del grupo de prensa privado Cadena Capriles, es algo que ha sorprendido gratamente a la asociación Reporteros Sin Fronteras.

Sin embargo, la organización que trabaja por la libertad de expresión en todo el mundo, se ha lamentado de la situación de polarización que vive el país que gobierna Hugo Chávez. “Damos nuestro apoyo a las redacciones de Cadena Capriles. El gobierno ha dado muestras reales de lucha contra la impunidad en este asunto al igual que lo hizo con el arresto de la militante Lina Ron, justo después de un asalto armado contra la sede de la cadena privada Globovisión, el 3 de agosto. No obstante, tememos que en un contexto que sigue siendo tan extremo, alimentado por nuevas legislaciones controvertidas y recientes cierres de medios de comunicación, el gobierno se vea cada vez más desbordado por unos militantes extremistas que se valen de él. La cuestión de los medios de comunicación exige más que nunca un debate nacional, que asocie todas las sensibilidades”, declaró Reporteros sin Fronteras.

La agresión del pasado 13 de agosto contra doce periodistas de Cadena Capriles, dejo a ocho de estos informadores en un estado grave.

Las principales sospechas por este ataque recaen en Gabriel Uzcátegui Beaumont, empleado de la Fundación Simón Rodríguez, y quien podría haber participado en la agresión contra dichos periodistas, mientras éstos se manifestaban pacíficamente contra algunas cláusulas de la nueva Ley de Educación en pleno centro de Caracas.

Poco después del arresto de Gabriel Uzcátegui Beaumont, el presidente venezolano Hugo Chávez condenó sin reservas tal agresión a través de la televisión. También denunció las violencias cometidas el 3 de agosto contra la cadena Globovisión, muy crítica con él y de la que fustiga a menudo el “terrorismo mediático” en antena.