Pensando en el medio ambiente

Según la última encuesta del Eurobarómetro, cuatro de cada cinco europeos afirman pensar en el medio ambiente cuando llevan a cabo una compra. Un 83 por ciento de los encuestados asegura que las repercusiones de un producto sobre el medio ambiente pesan “se forma importante” en sus decisiones de compra.

Los griegos son los ciudadanos europeos que, con mayor probabilidad, consideran las consecuencias para el medio ambiente del producto que compran, con un 92 por ciento de sus ciudadanos preocupados por la cuestión. Los checos son los que menos tienen en cuenta el impacto medioambiental de un producto, el 62 por ciento de su población lo hace.

Los europeos encuestados se dividen a partes iguales entre los que creen en las afirmaciones de los productores sobre el comportamiento ambiental de sus productos [49 por ciento] y los que no creen en ellas [48 por ciento]. Los holandeses son los que tienen más posibilidades de dar crédito a esas afirmaciones [78 por ciento], mientras que los búlgaros son los que menos crédito les dan [26 por ciento].

Sobre la fórmula para promocionar los productos respetuosos con el medio ambiente, un 46 por ciento de los ciudadanos de la UE cree que la mejor manera sería aumentar los impuestos sobre los productos perjudiciales para el entorno y disminuir los impuestos sobre productos que sí lo respetan. Los encuestados también se han declarado partidarios de que los comerciantes minoristas promuevan los productos respetuosos con el medio ambiente. Aproximadamente la mitad de los ciudadanos de la UE cree que deberían aumentar la visibilidad de tales productos en sus estantes o tener una sección ecológica en sus tiendas.

A pesar de que menos de la mitad de los europeos afirma que las etiquetas ecológicas desempeñan un papel importante en sus decisiones de compra, el 72 por ciento señala que una etiqueta que indique la huella de carbono de un producto debería ser “obligatoria en el futuro”.