Medina y Ruano jugarán la final de dobles

Las españolas Anabel Medina y Virginia Ruano, defensoras del título, se clasificaron con esfuerzo para la final de Roland Garros, segundo 'Grand Slam' del año, al superar en semifinales a Cara Black y Liezel Hubel.

Las subcampeonas olímpicas volvieron a hacer gala de su superioridad sobre tierra batida y doblegaron en tres mangas a las número uno del mundo por 7-5, 5-7 y 6-2 después de dos horas y 51 minutos de juego.

La torrentina y la madrileña tuvieron que echar mano de sus mejores armas para seguir en liza en la cita. Así, después de haber servido para forzar el 'tie-break' en el segundo set y haber encajado una rotura, saltaron a la cancha en la tercera manga con otra mentalidad.

Medina y 'Vivi' practicaron un juego más agresivo que las permitió convertir dos 'breaks' tempraneros (3-0). A remolque, la zimbauense y la estadounidense no supieron cómo recortar distancias y permitieron a las españolas clasificarse para su segunda final consecutiva en la que se medirán a las vencedoras del duelo entre Victoria Azarenka y Elena Vesnina contra Su-Wei Hsieh y Shuai Peng.

Las rivales de Virginia Ruano y Anabel Medina serán la pareja compuesta por la bielorrusa Victoria Azarenka y la rusa Elena Vesnina, en un partido en que las españolas tratarán de revalidar el éxito alcanzado en la edición de 2008.

Azarenka (cuartofinalista la pasada temporada) y Vesnina llegaron a la final tras derrotar en las semifinales a la china Shuai Peng y a la jugadora de Taipei Su-Wei Hsieh en dos mangas, 6-3 y 7-5, y serán el último obstáculo que deba superar el doble español para volver a hacerse con la Copa de los Mosqueteros.

De conseguir la victoria, sería el sexto triunfo en el dobles femenino para la madrileña en la que puede ser su última presencia sobre la tierra de París.

Para la torrentina, en cambio, sería su segundo título tras el conquistado en la última edición. La pareja española llegó a la final tras deshacerse en la ronda anterior de Cara Black y Liezel Huber, cabezas de serie número uno.