Kaká, ¿primer fichaje blanco?

Agencias

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Hace apenas unos días, durante el anuncio oficial de su presencia en las próximas elecciones a la presidencia del Real Madrid, Florentino Pérez aseguró que tenía en mente un proyecto 'ilusionante', en el que estaría dispuesto a realizar una gran inversión económica para devolver al conjunto blanco al lugar que se merecía.

Dicho y hecho. El empresario no ha tardado mucho tiempo en dar los primeros pasos y, desde Italia, ya se da por hecho que ahora sí que conseguirá hacer realidad un sueño que se le negó durante su primera etapa como máximo mandatario del club del Santiago Bernabéu: vestir a Kaká de blanco.

Por lo que se ha podido saber, tal como se afirma tanto en los rotativos transalpinos como en el diario AS, el acuerdo con el internacional brasileño es total. El futbolista considera que ha llegado la hora de poner fin a su etapa en el Milán después de que la formación rossonera haya realizado por dos temporadas un tanto mediocres y haya perdido la hegemonía de la Serie A en favor de sus vecinos del Inter.

Si el pasado mes de diciembre Kaká rechazó una multimillonaria oferta para fichar por el Manchester City, parece que en esta ocasión no desaprovechará la oportunidad de subirse a un tren con rumbo al barrio de Concha Espina, donde podría permanecer por las próximas cinco campañas. Cobraría una ficha de 12 millones de euros brutos por cada una de ellas y, por si todo eso fuera poco, conservaría el 50 por ciento de sus derechos de imagen.

Si Florentino Pérez consigue llegar al sillón presidencial el 14 de junio, el mundo del fútbol podría sufrir una gran conmoción

y todos los aficionados estaríamos ante un verano muy interesante en lo que a movimientos y 'cambios de cromos' se refiere. Dispuesto a invertir el dinero que haga falta para formar una plantilla de gran nivel, todo hace indicar que pagaría en torno a los 60 millones para hacerse con los servicios de Il Bambino d'oro.

¿Estamos ante una opción real o será otro de esos muchos rumores de los que seremos testigos en los próximos meses?.

Por lo pronto, sólo podemos decir que si hace unos años era casi imposible que la directiva del Milán dejase marchar a su gran estrella, hoy el panorama es muy distinto. La entidad rossonera no pasa por su mejor momento ni deportivo ni económico, por lo que podría verse obligado a traspasar a varios de los integrantes de su escuadra.

Desde Italia ya nadie se cree las últimas declaraciones del jugador, en las que negaba que fuese a cambiar de aires. Se asegura que no fueron más que una estrategia para evitar el malestar de los aficionados de su equipo actual y que su permanencia en el 'Calcio' tiene fecha de caducidad: 30 de junio de 2009.

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