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Benedicto XVI reza en la Sala del Recuerdo por las víctimas del Holocausto.

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El Papa continúa su visita al Estado de Israel. La jornada de ayer terminó con la visita del Pontífice al Monumento para el Recuerdo de los Mártires y Héroes del Holocausto, conocido en hebreo como el Yed Vashem. En el lugar, Benedicto XVI dedicó unos minutos de oración a las víctimas hebreas a las que fue dedicado este monumento.

El presidente del Yed Vashem, Avner Shalev, acompañó al Pontífice en su visita por el perímetro del monumento conmemorativo para después visitar la llamada Sala del Recuerdo, donde les recibió el Presidente de Israel, Simon Peres, junto con el representante del Parlamento Israelí Ruben Rivlin y el Gran Rabino Lau.

Durante el desarrollo de este acto, el Papa saludó y escuchó la historia de seis supervivientes del genocidio judío provocado por los nazis y de sus familias. En relación con las víctimas, el Pontífice declaró que su sufrimiento no puede ser negado, olvidado o disminuido, y que concierne a todas las personas vigilar para erradicar del corazón del hombre cualquier cosa capaz de producir a tragedias como la del pueblo judío.

En una crítica directa al nazismo, el Papa declaró que “se puede robar a los vecinos sus posesiones o quitarles la libertad, se puede construir una red de mentiras insidiosas para convencer a otros de que algunos grupos no merecen ningún respeto, pero nadie puede usurpar el nombre de otro ser humano”.

El acto finalizó tras la firma en el Libro de Honor y el canto del Hatikvah, el principal himno hebreo, que significa 'Nuestra Esperanza'. Un artista hebreo regaló a Benedicto XVI un cuadro, y finalmente el Pontífice se marchó después de saludar a los jóvenes componentes del coro y a muchos de los presentes.

Esta mañana, el Papa Benedicto XVI ha visitado el Muro de las Lamentaciones, destacado por ser el lugar más sagrado para los judíos, allí rezó en silencio durante unos minutos y después colocó entre las ranuras de las rocas un papel con una petición, tal y como marca la tradición judía. Esta es la segunda visita de un Papa al recinto sagrado judío, Juan Pablo II lo visitó por primera vez en el año 2000 durante su peregrinación a los Santos Lugares con motivo del Jubileo de la Iglesia Católica.

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