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Opinión - Pedir perdón y que resulte sincero. Por Esther Palomera

Divorcio Riquelme-Maradona

Rioja2

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Mientras Diego Armando Maradona esté al frente de la albiceleste, Juan Román Riquelme no vestirá la camiseta internacional. Se puede decir más alto, pero no más claro. Riquelme ha confirmado su negativa argumentando que no tiene “los mismos códigos” ni “la misma forma de pensar” que Maradona. Es claro: “no podemos seguir trabajando juntos. Con la selección están pasando cosas muy raras”, aseguró. Es la segunda vez que el centrocampista renuncia a jugar con la selección sudamericana.

En septiembre de 2006, tras recibir duras críticas de la prensa en el Mundial de Alemania, Riquelme adoptó la misma decisión, que cambió un año más tarde cuando el cambio de seleccionador, dejando al mando a Alfio Basile, cambió todo y le citó para la Copa América de Venezuela.

La semana pasada Maradona puso en duda la titularidad de Riquelme y ahí se armó el belén. Diego Armando le echó en cara las pobres actuaciones del de Boca en 2009. “Yo quiero a Román de enganche, en los últimos 20 metros, para marcar diferencia, con velocidad mental para habilitar a los delanteros y para que llegue al gol, pero el otro día en la cancha de Boca no sé si tenía problemas físicos o qué, pero así no me sirve”, apuntó sin pelos en la lengua.

El desencuentro continuó cuando Maradona afirmaba que había llamado varias veces por teléfono a Riquelme, pero ni pudo hablar con él ni le devolvió las llamadas. El jugador dijo que se enteró “por la radio” de que no iba a jugar el amistoso contra Francia en febrero y que ahora escuchó “por televisión” que está bajo de forma y que Maradona quiere que juegue más adelantado. “Es indudable que no compartimos los mismos códigos, no pensamos igual, y por lo tanto no podemos seguir trabajando juntos”, comentó. “Soy mayor para seguir aguantando palos y prefiero renunciar a la selección porque las cosas no vienen claras. Me muero por jugar en la selección y quiero que todo vaya bien. Me va a ser muy difícil ver el Mundial por televisión y me duele en el alma. El 2008 fue un año extraordinario: gané los Juegos Olímpicos y el campeonato local con Boca. Voy a seguir entrenándome para seguir logrando cosas con mi equipo, pero a la selección es mejor que vaya otro”, sentenció.

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