El Madrid recupera su mejor marcha gracias a Hervelle

El Real Madrid recuperó la senda de la victoria tras dos derrotas seguidas y, liderado por su mayor solidez y entidad en la pintura superó al DKV Joventut (100-88) logrando una victoria ante un rival directo que le asienta en la tercera plaza.

Tras su temprana eliminación copera y después de haber perdido en la última semana ante iurbentia Bilbao Basket y FC Barcelona,

los de Joan Plaza regresaron a su fortín de Vistalegre para llevarse una victoria que sirviera para acallar las dudas sobre su técnico.

Liderado por Hervelle (22 puntos), la mejor noticia del Real Madrid fue que hasta otros cinco jugadores alcanzaron los diez o más puntos,

y que ninguno de ellos fueron Bullock, Reyes y Llull, sus habituales mejores artilleros, mientras que en el Joventut, donde no fallaron Ricky Rubio (15), Pau Ribas (14) y Jasaitis (14), Hernández-Sonseca (12) echó en falta más ayuda bajo tableros.

El partido comenzó de manera trepidante, con un DKV Joventut liderado por Pau Ribas, que anotó 9 de los 12 primeros puntos de su equipo, que abrió la primera pequeña brecha (7-12). Pero no tardó el Real Madrid en reaccionar, apretar los dientes y, gracias a los de siempre, y, con un parcial 8-0, puso de nuevo la práctica igualdad (15-13).

Así, mientras en la 'Penya' se repartían los puntos, sólo cuatro jugadores, Mumbrú, Bullock, Hervelle y Llull (con triple para el empate a 20), conseguían anotar para los blancos, en un primer cuarto que se disputó a velocidad de vértigo.

El segundo no comenzó distinto, aunque los dos equipos se trabaron en el 31-27 durante varios minutos y el duelo se atascó en errores antes de que una antideportiva de Pepe Sánchez (que se retiró con una lesión en el codo izquierdo) sirviera al DKV Joventut para igualar la contienda y dos errores seguidos de los blancos supusieran otro 8-0 y el 31-35.

Pero en un partido marcado por los ataques --no siempre acertados--, los blancos devolvieron el parcial (6-0).

Y pudo ser más si Bullock y Raül López no hubieran fallado dos triples consecutivos antes del tiempo muerto (37-35) a poco más de dos minutos del descanso, donde Sito Alonso se hartó de pedir “trabajo” a los suyos.

La charla no valió de mucho (40-35), aunque la sangría concluyó con un mate Hernández-Sonseca, y los segundos finales sólo sirvieron para cerrar una primera parte que fue un aperitivo que dejó con ganas de más acierto. En la reanudación, la batalla de parciales no terminó y los locales llegaron al 15-2 desde al 31-35 al 46-37, pero los verdinegros echaron mano de la presión desde media cancha para, con un 6-0 volver a igualar la cosas (46-43).

Un triple de Hervelle, el gran estilete de los blancos, supuso una nueva brecha para los de Joan Plaza (54-46), pero otra antideportiva, esta vez de Felipe Reyes, que zancadilleó a Hernández-Sonseca, significó una jugada de cinco puntos para los visitantes y la práctica igualdad (54-53).

Además, Ricky Rubio, que también quiso ser protagonista siguió liderando a los suyos con solvencia y acierto

, pero la lucha no se cerró sólo con la guerra de parciales (59-59), aunque los locales lograron mantener una pequeña renta antes del último cuarto.

Sin embargo, la mejor noticia para el Real Madrid fue que, con varios de sus jugadores de los menos habituales en pista, no sólo no perdió la distancia, sino que incluso la amplió gracias la grata sorpresa de la actuación de Van den Spiegel, que aprovechó la debilidad de los verdinegros en la pintura, con la lesión durante el partido de Jagla y la ausencia de Norel, para hacerse el dueño.El DKV Joventut apostó por la zona, pero Sito Alonso no encontró soluciones y el Real Madrid acabó llevándose una renta mucho mayor de lo esperado

y quizá de lo merecido de uno haber sido porque los visitantes bajaron los brazos en los últimos instantes.