El Rincón del Buen Decir: Merry Christmas and a happy new year

Rioja2

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El año toca a su fin y una vez más nos toca celebrar el nacimiento de Jesús y las doce campanadas que indican que el 2009 acaba de entrar en nuestras vidas. Durante estas fechas las comilonas, el despilfarro, los adornos navideños y las palabras típicas de estas fiestas se adueñan de nosotros. La tradición no perdona y, aunque no nos demos cuenta, en el transcurso de estas fiestas daremos rienda suelta a palabras reservadas únicamente para este acontecimiento festivo. En el Rincón de esta semana invitamos a nuestros lectores a disfrutar de esos términos, vengan a conocerlos.

Un mes antes de que las fiestas den inicio comienzan los comercios a ponerse guapos para tremendo acontecimiento. Unas figuritas por aquí y unos espumillones por allí. ¿Espumillón? Sí, queridos lectores esa cinta de colores metálicos que colgamos de puertas, paredes, ventanas y balcones. El Diccionario de la Real Academia reconoce esta palabra pero con un significado diferente. El DRAE la define como 'tela de seda, muy doble, a manera de tercianela', indicando que proviene de “espumilla”. Lo típico es que estos espumillones adornen los árboles de Navidad, esos abetos, naturales o artificiales, que engalanamos con bolas, muñecos, espumillones y una estrella coronando la cumbre.

Manda la tradición que también se ha de colocar en cada casa un belén como Dios manda, nunca mejor dicho. El belén guarda relación con aquella lejana ciudad en la que nació nuestro señor Jesucristo, que ha tomado su nombre para simbolizar la representación su nacimiento. En todo belén que se precie no puede faltar entre sus pastorcillos un “caganet”, es decir un pastor que, debido a la urgencia que tuvo para hacer sus necesidades fue retratado “in situ” con los pantalones bajados y dejando un pequeño abono a la tierra que cultivaba. De que sea típico de Cataluña o no habrá que hablar en otro lugar.

Seguimos con las comidas típicas de esta época. Durante el año desaparecen de los supermercados, pero cuando llega Navidad, vuelven a poblar las estanterías de los centros comerciales los populares turrones. Los hay blandos, duros, de chocolate, de yema, con nueces, con avellanas... y de todos los sabores que podamos imaginarnos. Buceando por Internet hemos encontrado dos etimologías que se reparten el origen de la palabra turrón: la primera otorga el protagonismo al catalán “terró”, derivada de tierra por el aspecto que en un principio presentaba y que nada tiene que ver con la textura dura y consistente con la que ahora se presenta; otra versión asegura que proviene del castellano turrar-tostar forma arcaica castellana, procedente del latín “torrere”.

Continuamos endulzándonos el día con los polvorones, que debe su origen, según el DRAE a la palabra pólvora, 'partículas a que se reduce una cosa sólida', ya que si no nos damos mucha maña, al intentar comérnoslo se deshará en polvo. El mazapán, 'pasta hecha con almendras molidas y azúcar pulverizado, que se presenta en formas diversas', presenta una etimología dudosa. Algunas fuentes señalan que la palabra mazapán proviene del latín “martius panis”, 'pan de marzo'; aunque el DRAE atribuye su origen quizá al árabe pĭcmát, y este del griego παξαμαδιον, 'bizcochito', influido por “masa y pan”.

Un postre indicado para los de dientes más duros son las garrapiñadas, 'almendra bañada en almibar', de dureza considerable. La palabra garrapiñada proviene del verbo garrapiñar y este del latín vulgar *carpiniare, derivado de carpìre. Con los mismos ingredientes prácticamente y de la misma consistencia al masticar podemos degustar también en estas fechas el famoso guirlache, cuya etimología se atribuye, según el DRAE, al francés antiguo “grillage”, 'manjar tostado', y que se trata de una 'pasta comestible de almendras tostadas y caramelo.

Además de la flor de Pascua, existen dos plantas que toda casa que se precie debe tener y que, al parecer, traen buena suerte al que las posee, se trata del acebo y de muérdago. El acebo es un 'árbol silvestre de cuatro a seis metros de altura, poblado todo el año de hojas de color verde oscuro, con espinas, flores blancas y fruto en drupa rojiza'; el muérdago se trata de una planta que vive sobre los troncos y ramas de los árboles' y cuyo sitio debe ser elevado, pues el besarse bajo un ramillete de esta planta traerá la dicha a la pareja.

Cambiando de tercio y haciendo honor a esos hombres tan generosos que se cuelan en nuestras casas con la excusa de dejarnos regalos, pero que le dan buen palo a los dulces y al pacharán y moscatel que amablemente dejamos para que recuperen fuerza y puedan continuar con su labor. Dependiendo de la zona y la cultura estas personas serán unas u otras y recibirán un nombre u otro. En el País Vasco, por ejemplo, en Nochebuena viene a hacer una grata visita el Olentzero, un carbonero que durante el año vive oculto en las montañas y que el día de Navidad visita todos los hogares y deja sus particulares regalos.

También puede aparecer por la chimenea un hombre vestido de rojo y con barba blanca que se hace llamar San Nicolás, Santa Claus o Papá Noel y que llegará con la misma misión. Por último, los Reyes Magos, o Reyes de Oriente como les gusta que les llamen, son personas de la cultura popular cristiana, que hicieron su aparición por primera vez en el nacimiento de Jesús y que le llevaron de regalo oro, incienso y mirra, 'gomorresina en forma de lágrimas, amarga, aromática, roja, semitransparente, frágil y brillante en su estructura'.

Normalmente, los Reyes Magos tienen un protagonismo previo a la noche en la que reparten la ilusión por las casas, y es cuando hacen su aparición en la cabalgata, 'desfile de jinetes, carrozas, bandas de música, danzantes, etc, que se organiza como festejo popular' y que acerca a los más pequeños a las manos de sus majestades.

Para terminar, haremos una mención especial a esas fiestas que tras las campanadas, la señal de que un nuevo año ha dado comienzo, se suceden. Se trata de los cotillones. Los cotillones con esas 'fiestas y bailes que se celebran en días señalados como el fin de año o Reyes' y que nada serían sin el gorrito de payaso o el atronador matasuegras, 'tubo enroscado de papel que tiene un extremo cerrado, y el otro terminado en una boquilla por la que se sopla para que se desenrosque bruscamente el tubo y asuste por broma', y cuya etimología dejamos a la imaginación de nuestros lectores.

Desde el Rincón queremos desear a todos nuestros lectores una Feliz Navidad y un Próspero Año Nuevo. Esperamos que el 2009 nos siga trayendo palabras que descubrir y que compartir con ustedes. Si desean hacer alguna aportación estamos encantados de recibir sus comentarios. Hasta el año que viene. El Rincón del Buen Decir.

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