Medio Ambiente destina 500.000 euros el vertedero de Calahorra
El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino, con su publicación en el BOE de este sábado, ha aprobado la concesión de apoyo económico en una cuantía de 544.876,04 euros, sobre un total del coste de proyecto de 700.000, al vertedero de Calahorra para que se pongan en marcha la construcción, sobre el actual, de instalaciones de desgasificación de vertederos.
Según informa la Delegación de Gobierno en La Rioja en una nota de prensa, esta subvención, que nace por la necesidad de aplicar medidas urgentes de la Estrategia Española de Cambio Climático y Energía Limpia aprobada por el Consejo de Ministros de 20 de Julio de 2007, es un “apoyo económico directo del Gobierno de España en su compromiso de llevar a cabo políticas destinadas a cumplir con las obligaciones adquiridas y aprobadas en el protocolo de Kioto”.
El tratamiento óptimo para los residuos urbanos debe contemplar primero la máxima valorización con la separación de las fracciones reutilizables y, posteriormente, valorizando el rechazo energéticamente obteniendo electricidad y ceniza que, a pesar de ser depositada en vertedero, reduce su impacto medioambiental y su volumen de un 90%.
A pesar de ser éste el modelo ideal, los condicionantes económicos hacen del vertido controlado el sistema más habitual de eliminación. Datos del Ministerio de Medio Ambiente reflejan que en España, el 56,73% de la producción anual de RSU se eliminó mediante esta técnica. Existen multitud de vertederos de residuos urbanos que albergan en su interior gran cantidad de materia orgánica en proceso de descomposición.
Los vertederos de residuos sólidos urbanos presentan importantes impactos ambientales, pero es la producción de lixiviados y la generación del conocido biogás, resultante de la descomposición de la materia orgánica en condiciones anaeróbicas, los dos problemas más acuciantes en la gestión diaria de un vertedero controlado de residuos sólidos urbanos.
El supuesto de que los escapes de lixiviados puedan llegar a un cauce contiguo pueden generar, según la cantidad, graves problemas al ecosistema del medio, debido en gran medida a la alta carga orgánica que contienen.
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