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Opinión - Vivir sobre un polvorín. Por Rosa María Artal

Dos locales de copas más echan el cierre en Madrid

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El Ayuntamiento de Madrid ha ordenado la clausura y recinto de otros dos locales de ocio de la noche madrileña, 'El Randal' y 'Top Hat', por las presuntas irregularidades detectadas en sus licencias de funcionamiento, informaron fuentes municipales.

La Junta Municipal de Moncloa-Aravaca ordenó esta mañana el cierre de 'El Randal', un local de salsa situado en el número 38 de la calle de Ferraz. El precinto se produce porque tenía licencia de bar, pero funcionaba como discoteca.

Además, la Junta Municipal de Tetuán procedió esta mañana, a las 10.00 horas, al cierre de 'Top Hat', conocido como 'Penthouse Club', en el número 131 del Paseo de la Castellana 131. Fuentes municipales indicaron a Europa Press que este local tenía licencia de bar especial con actuaciones en directo, pero carecía de licencia de funcionamiento. Tampoco consta tramitación ni solicitud de la misma.

Estos cierres se suman a los ordenados el pasado viernes por el Ayuntamiento de Madrid contra La Riviera, Macumba, Moma y But por irregularidades en sus respectivas licencias. Lás órdenes de clausura se produjeron cinco días después del asesinato de Álvaro Ussía en la discoteca El Balcón de Rosales, la cual también fue clausurada por acumular 51 denuncias, 14 inspecciones y siete peticiones de cierre.

CIERRES DE LOCALES

La muerte del joven abrió la veda para el cierre de locales nocturnos. El Ayuntamiento de Madrid ordenó el viernes el cierre inmediato de la emblemática sala Macumba, en la estación de Chamartín. El cierre se produjo porque la licencia de funcionamiento no se correspondía con “el estado actual” de la sala.

La situación de esta discoteca es similar a la de La Riviera, cuya clausura fue efectuada también esa misma mañana. En ambos locales se efectuaron modificaciones que no estaban cubiertas por la licencia municipal. Así, ahora deberán esperar a obtener un nuevo permiso para poder abrir sus puertas. De hecho, La Riviera, que debería haber sido precintada en enero de 2007 por orden municipal, ya la tiene solicitada desde hace meses.

La Junta de Distrito de Centro ordenó el pasado miércoles la suspensión de la actividad al centro de baile But S.L., situado en la plaza de Barceló, junto a la discoteca Pachá. La decisión está motivada por “dos procedimientos judiciales que ratifican que este local no contaba con la preceptiva licencia de funcionamiento”.

Además, la Junta de Distrito de Chamberí decidó el viernes cerrar la sala MOMA, en la calle José Abascal, que tenía un expediente abierto por carecer de licencia de funcionamiento.

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