Javier Capitán visita Logroño

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Javier Capitán sabe que el sentido del humor es el más humano de los sentidos, y eso lo aplica en su faceta como comunicador y al analizar el día a día. Su carrera profesional es muy extensa, y ahora ha sabido adaptarse a las nuevas tecnologías.

¿Cómo un licenciado en ciencias económicas acaba dejando su trabajo de subdirector de marketing en Repsol, y pasa a los medios de comunicación para hacer humor político?

Trabajaba en Repsol y al mismo tiempo en la Cadena Ser, hasta que llegó un día en el que tuve que elegir. La gran empresa te sumerge en una especie de rutina, y lo otro ponía frente a mí la capacidad de enfrentarme a nuevos retos, así que me decidí por esto último.

¿Si tuviese que elegir entre radio y tele con cuál se quedaría?

Los dos me gustan y creo que son complementarios. Puede que la radio nos ofrezca un producto más personal.

Aunque ha hecho muchas otras cosas, El Informal es el programa con el que todos le identifican. ¿Esto le gusta o preferiría que también se recordase aquel periodo en el que se dedicó a la parte más formal de la profesión?

Tengo un magnífico recuerdo de mi etapa en El Informal. Han pasado 6 años y la gente sigue teniéndolo presente.

Ahora es el presentador de MobuzzTV. ¿ Qué tiene la tele digital que no tenga la otra?

Son dos formatos donde el ritmo es diferente. La televisión on line es un producto artesanal dentro de lo tecnológico. La visión aquí es más personal, los equipos son más pequeños y eso te permite moldear más el producto.

¿Y por qué hay tan pocos canales de televisión on line?

Porque los inicios son muy complicados, estamos en un momento crítico y hay un descenso de inversión publicitaria. La crisis nos toca a todos. En MobuzzTV no sabemos si vamos a continuar adelante.

¿En qué consistió la campaña “Salvar a Mobuzz”?

Nace de la desesperación porque no había dinero para seguir adelante. A la gente le cuesta arriesgarse con los nuevos proyectos. Entonces teníamos dos opciones: o cerrabamos o intentábamos sobrevivir. Lanzamos un vídeo en el que le decíamos a la gente que si les gustaban nuestros programas necesitábamos su ayuda. Pedimos que el que quisiese pagase para ver los próximos programas. Podían pagarnos lo que quisiesen y la idea se extendió como la pólvora. Se suscitaron miles de comentarios en la red, y no sólo en España, también en Francia y EEUU. Participaron casi 2000 personas y recaudamos entre 30.000 y 40.000 euros. Era mucho más de lo que podíamos esperar, pero de momento aunque seguimos emitiendo no lo hemos tocado. Además si no conseguimos el objetivo devolveremos el dinero.

Y pasando a su faceta como escritor. Tengo entendido que también ha publicado un libro...

“El corrupto impecable” en el año 94. Fue algo por encargo, pero eso es todo porque yo no tengo la disciplina del escritor.

Por último, nos acercamos a su lado más personal. Nació en Barcelona pero vive en Madrid. ¿No hecha de menos su ciudad natal?

En Barcelona me formé como persona y me gusta volver y difrutarla paseando por sus calles. Pero estudié en Madrid y mi madurez personal la he alcanzado allí. Madrid tiene las dos caras, es una ciudad muy abierta porque hay mucha gente que no es de aquí, pero también por eso muchos dicen que no la acaban de sentir como su propia ciudad, y de aquí viene su desorden.

También tengo entendido que una de sus grandes aficiones es la gastronomía. ¿Ha estado alguna vez en la Calle Laurel?

Claro, no es la primera vez que vengo a Logroño, y aquí siempre he disfrutado comiendo, además el vino es una de mis pasiones.

Muchas gracias, y esperamos que disfrute de nuestra ciudad.

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