EEUU barre de la pista a China

La selección de Estados Unidos, sin desplegar todo su potencial, aunque con momentos de buen juego e implicación, demostró que este año el oro olímpico sí es su verdadero objetivo y se impuso con comodidad (101-70) a la anfitriona China en su partido de debut en los Juegos Olímpicos de Pekín.

Para dejar bien claro que en esta ocasión si van en serio a por las medallas, el técnico norteamericano Mike Krzyzewski, al que se le plantea el reto de convertir tanto talento en un bloque sólido y solidario, dispuso sobre la cancha un quinteto inicial de lujo formado por Jason Kid, Carmelo Anthony, Kobe Bryant, LeBron James y Dwight Howard.

Pese a esa constelación de estrellas, lo cierto es que a la maquinaria estadounidense le costó carburar en los primeros compases por dos razones fundamentales, la fulgurante salida de los chinos, trabajadores incansables y con destellos de calidad de la mano de los NBA Yao Ming y Yianlian Ji, y unos nefastos números en tiros de tres (7 de 24 en todo el partido).

Así, hasta mediado el segundo cuarto, las ventajas de Estados Unidos fueron muy cortas, e incluso China llegó a contar con algún margen en algunos momentos. Sin embargo, en esta ocasión, y a diferencia de a lo que nos tenía acostumbrados en otras citas olímpicas, los norteamericanos no especularon con el marcador y se lanzaron a por la victoria.

El segundo tiempo fue ya coser y cantar para los de Krzyzewski, que se encontaron un cuadro anfitrión que pagaba muy caro los excesos de los primeros minutos. Ni siquiera fue necesario para arrollar a su rival la mejor versión del 'MVP' de la temporada en la NBA, Kobe Bryant, que con 13 puntos se quedó muy lejos de sus habituales registros en Los Lakers, pero es que otras piezas claves como Dwayne Wade (19 puntos) o LeBron James (18) ya se encargaron de dejar claro que este año Estados Unidos sí va en serio.