Crece el beneficio de Caja Rioja
En un comunicado, Caja Rioja ha destacado que ese incremento se ha conseguido en “un contexto económico significativamente menos favorable que el de años anteriores”.
Sus datos indican que el margen de intermediación -diferencia entre ingresos financieros y gastos financieros derivados de la típica actividad bancaria- ha sido de 32,3 millones de euros, con un incremento interanual del 18,23 por ciento.
El margen de explotación se ha situado en 17,1 millones de euros, un 19,19 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior; mientras que el balance al treinta de junio de 2008 se ha cerrado con un saldo de 3.608,1 millones de euros y un incremento interanual del 12,06 por ciento.
El crédito a la clientela ha registrado un aumento interanual del 10,49 por ciento y ha alcanzado un volumen de 2.809,9 millones de euros; y el crecimiento acumulado desde primeros de año es del 5,35 por ciento, con un incremento en la financiación hipotecaria a adquirentes de primera vivienda habitual, así como a actividades productivas empresariales y operaciones de “leasing”.
Los depósitos de la clientela aumentaron un 11,62 por ciento interanual hasta alcanzar los 3.082,8 millones de euros; la variación acumulada desde el inicio del año es del 6,09 por ciento. “Se han mantenido unos excelentes niveles de liquidez, con una amplia cartera de títulos de deuda y renta fija, descontables ante Banco de España, así como posiciones activas garantizadas en el mercado interbancario”, ha añadido.
La tasa de morosidad se ha situado en el 0,75 por ciento, lo que ha supuesto un ascenso, aunque dentro de los parámetros previsibles, “como consecuencia del deterioro de la situación económica nacional, que, no obstante, se mantiene entre las más bajas del sector”.
La cobertura de morosidad asciende al 242 por ciento, los márgenes de la cuenta de resultados, la estructura del balance y las ratios anteriores manifiestan una “satisfactoria” evolución de la entidad, en un contexto de mayor “dificultad”, para el que ya se establecieron las bases de actuación en el anterior Plan Estratégico, desarrollado con los principios de crecimiento sostenible, moderado, rentable y solvente.
Caja Rioja entiende que “estos datos reflejan un adecuado equilibrio de balance, rigor en la concesión y gestión de riesgos, fortalecimiento de la liquidez, mejora de la eficiencia y generación consistente de beneficios, que nos permiten robustecer una holgada solvencia y cumplir nuestra función social”.
Caja Rioja dispone de 513 empleados y 122 oficinas, de las que 29 están en Logroño.
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