La Rioja y Castilla León se unen para impulsar un nuevo modelo de financiación

El presidente riojano, Pedro Sanz, ha “exigido” hoy al del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que no sea “un árbitro casero” en financiación autonómica o presupuestos del Estado, mientras que el de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha defendido la voz de las comunidades “no estridentes” en el debate.

Sanz y Herrera, los dos del PP, han firmado en Valladolid un protocolo de colaboración que recoge, entre otros quince puntos, la defensa común de un nuevo modelo de financiación autonómica basado en la solidaridad y la suficiencia económica, y aunque han valorado la primera ronda de contactos abierta por el Gobierno central han recelado de las pretensiones de comunidades como la catalana.

Herrera, en rueda de prensa tras la firma del protocolo, ha defendido que “debe tomar fuerza” la posición de comunidades que “no son estridentes” en materia de financiación autonómica, que aportan un tono de “mesura” al debate, como Castilla y León o La Rioja, y “apuestan por la igualdad” de servicios para todos los ciudadanos con independencia de donde vivan.

En este sentido, ha recordado además la coincidencia en torno a la financiación con comunidades como Aragón, con cuyo presidente, Marcelino Iglesias, compartió el pasado martes en Zaragoza que el nuevo modelo debe tener en cuenta “el coste diferencial” de la extensión geográfica y el envejecimiento.

También está en la misma línea Asturias, según ha explicado Herrera, con cuyo presidente, Vicente Álvarez-Areces, firmará un protocolo de colaboración similar al rubricado hoy el próximo 8 de julio en Oviedo.

No obstante, el presidente castellanoleonés ha confiado en que el proceso “madurará” y dará lugar “a un mejor sistema de financiación para todos”.

“Aún queda mucho camino que recorrer y yo quiero ver al presidente del Gobierno cómo resuelve estas situaciones, cuando se ha permitido que, por primera vez en la historia democrática, la financiación se recoja en los estatutos de autonomía”, ha observado por su parte Sanz.

El presidente del Ejecutivo riojano se ha preguntado qué pasaría si se llega a un sistema de financiación distinto al que tiene Cataluña en su Estatuto, y si esto llevaría a una reforma del texto máximo de esa autonomía.

A su juicio, “hay cosas que se han hecho mal y hay que conducirlas a un camino totalmente diferente”.

También ha destacado la importancia que tiene la participación de las autonomías en los presupuestos del Estado a la hora de financiar infraestructuras como las exigidas hoy por las dos comunidades, conversión en autovía de la N-120 o la puesta en marcha del túnel de Piqueras, “que debe estar acabado pero por el que hoy” él no ha podido pasar.

“Hay que poner las cosas en su sitio y exigir al presidente del Gobierno que sea garante para todos y no sea a veces un árbitro casero o que pite para unos las faltas de una forma u otra” y que “las reglas del juego las tengamos todos en la misma dirección”, ha reflexionado Sanz.

En el encuentro, amigable y cordial, los dos presidentes han estado arropados por cuatro consejeros de cada uno de sus respectivos gabinetes.

Por parte de La Rioja han asistido los titulares de Presidencia, Emilio del Río; Educación, Cultura y Deporte, Luis Alegre; Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Íñigo Nagore; y Vivienda y Obras Públicas, Antonino Burgos.

Del Gobierno castellanoleonés han estado presentes en la firma del acuerdo la vicepresidenta primera de la Junta y consejera de Medio Ambiente, María Jesús Ruiz, y los titulares de Fomento, Antonio Silván, de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, y de Hacienda, Pilar del Olmo.