Cohetes y cañas para celebrar el triunfo de la Selección

La media de edad no superaba los 25 años y casi todos ellos eran estudiantes. Durante dos horas han aparcado los libros en la Biblioteca de la Universidad para disfrutar del partido de la Eurocopa. Y es que jugaba España y encima de la mesa, además de cerveza, patatas fritas y algún que otro pincho, la ilusión de pasar a cuartos de final, la temida barrera.

“Yo creo que España va a ganar la Eurocopa” dice David, un joven de 20 años muy optimista. Su compañero de mesa, Pablo es más escéptico, “deberían irse a casa ya, con ese juego son la vergüenza del país.”

Ni tanto ni tan calvo. España ha conseguido ganar a los suecos, no ha habido sorpresas, afortunadamente. Todos los pares de ojos seguían atentos a lo que ocurría en la enorme pantalla que el bar Pop, de Logroño, ha colocado en su establecimiento.

Entre el humos de los cigarros, se ven caras de sufrimiento. Pocos hablan. Se han tomado un descanso en la preparación de los exámenes de junio para disfrutar de la Eurocopa.

“Cuando marca un gol España, hay gritos de alegría” nos cuenta Marga, camarera del bar. “Nos hemos preparado para este partido, más cerveza y más pinchos. Este ambiente da alegría.”

Es el momento más esperado, cuando Villa marca el definitivo 2 a 1, y en Logroño lo celebran con gritos que provienen de balcones cercanos e incluso con algún cohete que retumba en la ciudad, atenta a las botas de los jugadores.

El tiempo acompaña en esta tarde de junio. Por fin ha salido el sol y la temperatura es agradable. En la terraza del bar Pop, varias familias disfrutan de la tarde del sábado. Ellos miran de reojo la pantalla que está en el interior del bar. Es imposible no enterarse de lo que hace España, con la algarabía que se ha formado dentro. “El fútbol no me quita el sueño” dice uno de los hombres, su mujer está mas nerviosa, “a mí me gusta más que a él” afirma sonriente “ lo malo es que seguramente no pasen de cuartos”.

Pero eso ya se verá. Por lo pronto celebremos este triunfo de la Selección. Soñar es gratis.