La portada de mañana
Acceder
La izquierda busca reconstruirse ante el nuevo ciclo político
El PP de Ayuso bloquea la investigación de los negocios de su pareja
Opinión - 'Un español cuenta algo muy sorprendente', por Isaac Rosa

Consumidores contra la bollería

Europa Press

0

Las grasas saturadas aumentan los niveles de colesterol LDL (malo) en sangre, contribuyendo a la aparición de arteriosclerosis. La organización, que ha realizado un estudio sobre el tipo y cantidad de grasa que llevan 49 productos elaborados de bollería y repostería, galletas, aperitivos, pan, salsas y patatas fritas, sostiene que sólo el 20 por ciento de ellos informa en su etiqueta el tipo de grasa que contiene.

“Los fabricantes pueden utilizar la mención 'aceites vegetales', en la que cabe desde el aceite de oliva hasta el de coco”, explicó la OCU, para quien la legislación al respecto es “permisiva y anticuada” y permite a los fabricantes utilizar en los alimentos cualquier tipo de grasa que sea comestible. “Es más, está legislación no les obliga a mencionar en la etiqueta de que grasa se trata”, añade la organización.

PATATAS FRITAS

Dentro de los productos analizados por la OCU en su estudio, publicado en su revista OCU-Salud del mes de junio, destaca la cantidad de grasa detectada en las patatas fritas: 34 por ciento de media. Los aperitivos y la bollería no se quedan atrás, el contenido de grasa medio es un 24 por ciento.

Lamentable es el caso, añade la OCU, de unas galletas que llevan un 94 por ciento de grasas saturadas o un aperitivo con un 74 por ciento.

Con todo, reclama a los fabricantes, que cuiden más la calidad de las grasas, sobre todo, en alimentos de consumo habitual como las galletas y a la Administración, que modernice una legislación “permisiva” que permite utilizar cualquier tipo de grasa comestible y, que sea “obligatorio declarar qué grasa lleva cada producto”.

Etiquetas
stats