Los Bancos de Alimentos trabajan para certificar la transparencia de su actividad

La Asamblea Nacional de los Bancos de Alimentos de España, que se reunirá en Logroño los dos próximos días, analizará el trabajo que desarrollan estas entidades sin ánimo de lucro para certificar la transparencia de su actividad, según ha afirmado hoy su responsable en La Rioja, Francisco Ortiz de Zárate.

Ortiz de Zárate, presidente del Banco de Alimentos de La Rioja, y el presidente honorario de esta entidad, Antonio Alonso, han presentado el contenido de esta Asamblea Nacional, a la que asistirán unas 140 personas, representantes de 41 de los 52 Bancos de Alimentos que existen en España.

Ortíz de Zárate ha afirmado que se trabaja con la Fundación Lealtad para acreditar esa transparencia de la actividad y gestión de los Bancos de Alimentos, que son organizaciones sin ánimo de lucro basados en el voluntariado. Ha recordado que el objetivo de estas entidades es la consecución y aprovechamiento de los alimentos excedentarios con intención de hacerlos llegar a los centros asistenciales y, a través de ellos, a las personas que los necesiten.

Los asambleístas tratarán asuntos relacionados con el funcionamiento de los Bancos de Alimentos y el trasvase de experiencias en esta materia; así como la necesidad de que la sociedad perciba la transparencia de esta actividad, ha dicho. Por ello, sus responsables intentan que la actividad que desarrollan esté homologada con parámetros reconocidos de transparencia, tanto ante la sociedad como ante las empresas y organizaciones que colaboran con los Bancos de Alimentos.

Sus datos indican que los Bancos de Alimentos españoles, que disponen de un millar de voluntarios, distribuyeron el año pasado casi 50.000 toneladas de alimentos, de las que se beneficiaron casi un millón de personas.

El Banco de Alimentos de La Rioja, con 31 voluntarios, repartió en 2007 unas 737 toneladas de alimentos entre 10.500 personas, a través de un centenar de entidades benéficas.

Ortíz de Zárate ha detallado que uno de los problemas del Banco de Alimentos riojano es que tiene una escasa capacidad de almacenaje de alimentos, dado que dispone de una superficie permanente de 300 metros cuadrados y de una plataforma logística de la misma superficie, por lo que uno de sus proyectos es, con la ayuda de las administraciones, solucionar esta situación.