También para mayores

Rioja2

0

A pesar del cribado para la detección precoz, el cáncer de cuello de útero es la causa más común de muerte por cáncer entre mujeres jóvenes en Europa de entre 15 y 44 años y sólo por debajo del cáncer de mama. Anualmente, se diagnostican 33.500 casos de cáncer de cuello de útero en Europa y se estima que 15.000 mujeres mueren por esta enfermedad cada año. “Junto al cáncer de cuello de útero, el virus del papiloma humano es causante de otras patologías que aparecen antes del cáncer de cuello de útero y que pueden afectar a otros órganos genitales, como lesiones cervicales precancerosas y tempranas, cáncer de vulva y vagina, lesiones precancerosas de vulva y vagina y verrugas genitales”, explica Santiago Palacios, presidente del Comité Organizador del VIII Encuentro de Salud y Medicina de la Mujer que se celebra desde hoy hasta el próximo 14 de marzo en Madrid.

Aunque las verrugas genitales no suponen un proceso potencialmente mortal, pueden provocar síntomas clínicos, como quemazón, picor, sangrado y dolor, así como también estrés psicosocial, resultante todo ello en una disminución de la autoestima, autopercepción negativa, turbación y ansiedad. Aunque eficaces a corto plazo, las terapias de ablación física de las verrugas son dolorosas y sus tasas de recidiva son altas si solamente se escinde la lesión visible sin que se haya eliminado la infección. Según el doctor Palacios, “no está demostrado que el virus del papiloma humano de tipo 6 y 11, que causa el 90% de los episodios de verrugas genitales, cause cáncer de cuello uterino. No obstante, las mujeres con antecedentes de verrugas genitales presentan un aumento del riesgo de lesiones de cuello uterino y de cáncer de cuello uterino que muy probablemente se explica por un mayor riesgo de infectarse por otros tipos de virus del papiloma humano causantes de cáncer”.

Ésta es una de las razones por las que los expertos, en la actualidad, se están planteando los beneficios de ampliar la edad de vacunación de los 14 a los 26 años. En este sentido, el doctor Palacios afirma que “a la luz de los resultados de eficacia e inmunogenicidad muy altas frente a lesiones intraepiteliales de cuello de útero y frente a verrugas genitales y neoplasias intraepitaeliales de vagina y vulva, se debería recomendar de forma proactiva la vacunación en mujeres hasta los 26 años”.

POR EDADES

Las dos vacunas disponibles en la actualidad para prevenir la infección por VPH han puesto de manifiesto una mayor eficacia en niñas menores de 14 años. “Este grupo ha demostrado responder con más altos niveles de respuesta inmunitaria que los grupos de edades posteriores y ambas vacunas presentan la máxima potencia preventiva en los ensayos en las mujeres que no han tenido contacto con el virus”, explica el doctor Palacios, “por lo que es evidente que el grupo diana lo constituyen aquellas niñas entre 9-10 y 14 años con máxima inmunogenicidad y posibilidad bajísima, en España, de haber iniciado sus relaciones sexuales”.

Ante esta situación, este experto hace hincapié en la necesidad de recomendar de forma preactiva la vacunación frente a este virus, “siempre en el marco de un programa de educación sexual global, en el que se tengan en cuenta los conceptos de sexualidad, anticoncepción y prevención de enfermedades de transmisión sexual”, afirma.

En cuanto a las mujeres hasta los 26 años, Santiago Palacios comenta que “aproximadamente 8 de cada 10 mujeres españolas de esta edad mantienen relaciones sexuales habituales; la posibilidad de que una mujer esté infectada por los tipos 6, 11, 16 y 18 tiende a ser de cero, y en mujeres que han contactado con el VPH, la eficacia vacunal baja, pero se mantiene en rangos altos. Por ello, también hasta los 26 años de edad se debería recomendar de forma preactiva la vacunación”.

ESPAÑA

En España se diagnostican alrededor de 2.100 casos de cáncer de cuello de útero y se estima que 739 mujeres fallecen al año por esta causa. Respecto al número de muertes por comunidades autónomas, Andalucía encabeza la lista, seguida de Cataluña, la Comunidad Valenciana y Madrid. Aunque la tasa de mortalidad por cada 100.000 mujeres la lidera Asturias, seguida de Canarias, Baleares y Galicia.

Actualmente, la vacuna contra el cáncer de útero está financiada por el sistema público de salud para niñas de entre 11 y 14 años de edad en las comunidades de País Vasco, Navarra, La Rioja, Castilla La Mancha, Canarias, Ceuta y Melilla. Madrid y Cantabria están también a punto de empezar a vacunar. Según el doctor Palacios, “poco a poco todas las comunidades autónomas deberán ir incorporando a sus calendarios vacunales oficiales esta vacuna con el fin de ofrecer un futuro mejor desde el punto de vista de la salud a niñas, jóvenes y mujeres”.

“No obstante”, añade este experto, “incluso habiendo sido vacunadas, se debe practicar el cribado secundario de cáncer de cuello de útero con un test del virus del papiloma humano”.

En España, más del 70% de las personas sexualmente activas, tanto hombre como mujeres, estarán infectadas por el virus del papiloma humano (VPH) en algún momento de su vida. Se trata de la enfermedad de transmisión sexual más frecuente en la mujer, siendo el pico de prevalencia máxima en mujeres entre 25 y 29 años, y cuya infección persistente es el primer requisito para el desarrollo del cáncer cervical.

“Es importante tener claro que aunque el virus del papiloma humano está considerado agente causal del pre-cáncer o cáncer de cérvix (cuello uterino), sin embargo, de los más de 100 tipos de virus que incluye la familia VPH, sólo unos pocos tienen un alto potencial oncogénico, y la mujer infectada por VPH evoluciona hacía la curación en el 90% de los casos”, explica el doctor Palacios. “Además, existen una serie de co-factores que pueden ayudar a su persistencia y progresión cancerígena, como el tabaquismo y la inmunodepresión (infección por VIH y tratamientos inmunosupresores en receptores de trasplantes)”.

Etiquetas
stats