Zapatero pide el voto a la “gran mayoría” que quiere tolerancia y bienestar

Europa Press

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El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a la reelección, José Luis Rodríguez Zapatero, dio el pistoletazo de salida de la campaña electoral pidiendo el voto de la “gran mayoría” de españoles que quiere igualdad entre hombres y mujeres, Estado del bienestar, paz, optimismo, confianza y progreso. “A esa mayoría me dirijo para que el 9 de marzo pierda la intolerancia y la crispación”, manifestó.

Zapatero abrió la campaña electoral en Madrid ante más de 2.000 personas en el Palacio Municipal de Congresos y comenzó su intervención recordando a las víctimas de los atentados del 11-M y a todas las víctimas del terrorismo, con el auditorio puesto en pie.

Por tercera noche consecutiva, el líder socialista tuvo que apelar a la contención y al diálogo cuando un grupo de funcionarios de justicia -más de cien en esta ocasión- trató de reventa el mitin con carteles con la leyenda 'Justicia en huelga'. Los manifestantes fueron desalojados mientras los asistentes al mitin gritaban “Zapatero presidente” y el candidato socialista repetía que el PSOE respeta la libertad sindical y de expresión y que el Gobierno ya está dialogando con los funcionarios en huelga, pero le costó unos minutos calmar al auditorio para lanzar su mensaje, que todo que el PSOE ha “conseguido en estos años es gracias al voto de los ciudadanos”.

Zapatero, que entró en el auditorio al Palacio Municipal de Congresos poco antes de las 23.45 horas acompañado por su mujer, Sonsoles Espinosa, estuvo arropado por otros candidatos de la lista socialista por Madrid, entre ellos Cristina Narbona, Diego López-Garrido, Trinidad Jiménez, Antonio Hernando y Jaime Lissavetzky, además de miembros de la Ejecutiva del PSOE.

Tras estrenar el lema del PSOE para las próximas dos semanas, “Vota con todas tus fuerzas”, Zapatero dio inicio a una campaña que consideró “decisiva” porque se decidirá “entre una política de diálogo y convivencia o una de ordeno y mando” como la que, dijo, propugna el PP.

Así, destacó que aunque el “adversario” de los socialistas es el PP, su verdadero “enemigo” es la abstención y, frente a la “gente que piensa que da igual votar que no votar”, subrayó que ha sido “el voto de los ciudadanos” el que logró la retirada de las tropas de Irak y otras decisiones de su gobierno como la subida de las pensiones mínimas y el salario mínimo y las leyes de igualdad y dependencia. “Esa es nuestra única fuerza, el voto de los ciudadanos”.

TONO POSITIVO

Zapatero no se prodigó esta vez en críticas al PP --aunque sí sugirió que Manuel Pizarro no sabe de contabilidad y le recordó que defendió la privatización de las pensiones se refirió al primo de Rajoy-- sino en insistir en el valor del voto en la democracia.

Así, defendió que ha sido el voto “de mucha gente que no sale en una tertulia ni escribe en un periódico”, lo que a lo largo de 30 años de democracia ha convertido a España en un país “libre, democrático, europeo y moderno”.

En esta línea, afirmó que el 9 de marzo se abrirá “una nueva página de la digna historia” de la democracia española y los españoles e hizo hincapié en que el “viejo y nuevo ” partido socialista es el que tiene entre sus valores la “defensa de la constitución, de la libertad y de las tolerancia”. “Los españoles somos tan capaces como cualquier otro pueblo cuando nos dejan ser libres”, añadió.

Los españoles, prosiguió, elegirán el 9 de marzo entre la apuesta por la escuela pública y su abandono, el aumento de las becas para la igualdad de oportunidades o su reducción como, dijo, hizo Mariano Rajoy cuando fue ministro; entre la protección social y los “decretazos” de los 'populares'. Por ello, pidió el voto a la “clara mayoría” de españoles que quieren “más tolerancia”, igualdad entre hombres y mujeres, respeto a todas las creencias y a la orientación sexual, y progreso y confianza en el futuro, a los trabajadores y a los “jóvenes solidarios, activos y comprometidos”.

NO EXTENDER LA CRISPACIÓN

Zapatero dijo a sus simpatizantes que si gana el egoísmo, la crispación, “el afán sin más del poder por del poder”, éste “se trasladará a todos los ámbitos, a la oficina, a la fábrica” pero “si gana la tolerancia tendremos una España mejor”.

“En definitiva, el 9 de marzo decidimos, lo han dicho ellos, entre la España de antes y la España del futuro”, señaló Zapatero, advirtiendo de que “esta es la españa de la confianza, es la España del futuro, la España de antes no volverá nunca”.

La intervención de Zapatero estuvo precedida por la del secretario general del PSM, Tomás Gómez, y la de la ministra de Educación y número 3 por Madrid, Mercedes Cabrera, que hizo una defensa del derecho de las mujeres al aborto y acusó al PP de “criminalizar” a las que lo hacen. “Pocas cosas son más terribles para una mujer que tener que tomar la decisión de abortar, es intolerable”, afirmó.

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