El cambio tranquilo

Tras casi cincuenta años al frente de Cuba, Fidel Castro anunció el martes su renuncia a ocupar la presidencia del país. Fue, sin duda, la noticia del día, pues su repercusión alcanzó todos los rincones del planeta. Rioja2.com ha querido hacer su pequeña contribución y, así, ha tratado de recoger las impresiones de algunos cubanos residentes en Logroño. En líneas generales las primeras impresiones son de alegría, asombro y expectación.

“Es una noticia formidable. Estoy muy contenta. La estructura política del país se había quedado arcaica y es precisa una renovación”. Estas declaraciones pertenecen a Juana, seudónimo atribuido a una mujer cubana que lleva viviendo dieciséis años en Logroño y que no ha querido desvelar su identidad. Recientemente ha visitado Cuba y su impresión no puede ser más pesimista. “Cuba cada día está peor. Mucha gente achaca los problemas al bloqueo norteamericano, pero, en mi opinión, el origen de esta situación se encuentra en la mala administración. Es muy fácil echar la culpa a un tercero sin asumir ningún tipo de responsabilidad”.

ESPERANZA

¿Cuáles son las esperanzas del pueblo cubano ahora? Una primera respuesta podría ser que ahora se dan las circunstancias para un cambio. La apertura política y la mejora de la situación en la que viven los habitantes de este país son deseos que permanecen en las mentes de muchos.

“No va a haber cambio”, señala Juana. Desde su punto de vista, todo transcurrirá en la misma línea que hasta ahora, aunque confía en que en un futuro no muy lejano la gente de allá pueda recibir mayor ayuda y mejorar su nivel de vida.

“Cuba va a seguir siendo Cuba”, coincide en apuntar Alejandro Zayas. “Nuestro comandante en jefe está enfermo y necesita descansar, pero Cuba no se convertirá en un estado asociado a Estados Unidos como es el caso de Puerto Rico. No va a pasar nada”. Zayas es un bailarín que desde hace cuatro años reside en la capital riojana. Siempre pensó que en Cuba se vivía muy mal, pero tras sus numerosos viajes por Latinoamérica con la compañía de baile, llegó a la conclusión de que en otros países “la situación era mucho peor”.

“En Cuba siempre ha habido una democracia. El pueblo va a seguir manteniendo el mismo sistema”. Zayas es consciente de que surgirán grupos que aprovechen la ocasión para manifestar su disconformidad con el poder, pero les resta importancia. “En España también existen personas que no están de acuerdo con Zapatero”. En su opinión, son aspectos propios de la forma de ser de las personas.

ASOMBRO

Onelia Torres y Yunexi Rodríguez continúan perplejas por la trascendencia de la noticia. “Estoy asombrada y no me lo acabo de creer. Nunca pensé que iba a ser tan fácil”, afirma Torres. “Pensábamos que se iba a morir en el cargo”, añade su amiga.

Ambas coinciden en afirmar que ahora se abre un periodo de incertidumbre en Cuba. “No sabemos lo que va a pasar. Está claro que mucha gente no está de acuerdo con el régimen, pero no se puede decir nada”, insiste Onelia Torres. A partir de este momento es probable que algunas personas aprovechen las circunstancias para pedir un cambio, pero no parece que éste vaya a ser rápido. “Por el bien de mi país, espero que haya un cambio, pero un cambio positivo, pacífico, sin violencia ni guerra y sin injerencias”, apostilla.

Onelia Torres lleva cuatro años en Logroño, pero antes de su estancia en España estuvo en Hungría, Checoslovaquia y Alemania. Reconoce que le gustaría volver, “toda mi familia está allí”, constata, pero, para ello, es preciso que las condiciones mejoren. “Está claro que no hay libertad. Por eso, la gente se va. Confiemos en que el cambio sea para mejor”, concluye Yunexi Rodríguez.