Escriba a su cirujano

Rioja2

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“El pilar de la comunicación entre médicos y pacientes ha sido siempre la relación cara a cara. No obstante -explican los autores de una nueva investigación al respecto- los avances tecnológicos han puesto en entredicho esa afirmación”. El correo electrónico, que se usa en todo el mundo y ha transformado ya la comunicación en diversos sectores industriales, está muy poco estudiado en el ámbito de la salud pública, a su modo de ver.

Peter Stalberg es el coordinador de este estudio, que analizó la situación de un centenar de pacientes antes y después de someterse a cirugía de tiroides. Del total, 50 individuos recibieron información del cirujano antes del procedimiento, incluyendo su dirección de correo electrónico e indicando que los mensajes a dicha dirección serían su vía de comunicación preferida. A la otra mitad del grupo se le proporcionó información, pero sin dirección de correo ni indicaciones sobre cuál sería el canal preferido por el especialista para hablar con su paciente.

En realidad, todos podían haber encontrado la dirección en la tarjeta del médico en cuestión y en la página de internet del hospital. Con este material, los investigadores analizaron el grado de satisfacción y la calidad de la comunicación de todos los sujetos con sus respectivos médicos.

Un 26 por ciento de los voluntarios tomaron la iniciativa y se dirigieron a los cirujanos cuando se acercaba el momento de la operación. La mayor parte de los mensajes se refería a un asunto concreto (en el resto se trataban varias cuestiones).

La conclusión de los autores es que las personas que suelen usar el correo electrónico prefiere poder dirigirse a su médico a través d este canal y que, a pesar de las preocupaciones, darles acceso a hacerlo mejora la comunicación y el proceso de la cirugía. El trabajo se ha dado a conocer en la revista estadounidense 'Archivos de Cirugía'.

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