Empatados a todo

La historia, de momento, no sirve ni siquiera para apostar por internet. Los derbis entre Logroñés y LCF, incluyendo aquellos que ambos equipos jugaban cuando los de Eduardo Blanco aún se llamaban Recreación, arrojan un balance lo más igualado posible.

Cada uno de los dos clubes ha ganado dos partidos y han empatado en otro. Hasta en goles están igualados los conjuntos: en cinco partidos han conseguido 6 goles cada uno. Las cifras son tan parecidas que ambos equipos tienen hasta los mismo goles en propia puerta en sus enfrentamiento directos

El historial de derbis se abrió en la jornada 17 de la campaña 2003-2004, cuando ambos equipos, más Alfaro y Calahorra, militaban en el grupo I de Segunda B. A ese partido el LCF llegaba en una situación envidiable: ocupaba la sexta plaza, pero estaba a tan sólo tres puntos del segundo clasificado, el Pontevedra. El Logroñés, por su parte, estaba, como ahora, en puesto de promoción. Ambos equipos llegaban después de vencer en sus compromisos anteriores y ambos contra equipos riojanos: los blanquirrojos habían ganado a domicilio al Alfaro (0-1), mientras que los rojiblancos habían doblegado al Calahorra (2-1).

La afición del Logroñés vivió aquel día uno de sus momentos felices en aquella campaña. Consiguió superar, en un buen partido, al Recreación por 2-3, lo que le sirvió para subir un puesto en la tabla después del partido. Aquel día marcaron Suárez, Rivera, Fúriga, Diego y San Miguel (en propia puerta) y el encuentro se jugó en el Mundial 82.

En la segunda vuelta, el CF no sólo le devolvió la moneda al Logroñés, sino que dejó muy tocada la nave blanquirroja, que tras salir derrotado 0-1 con un gol de Encinas, cayó del puesto undécimo, al decimoquinto y se quedó a tan sólo un punto de la promoción y a dos del descenso. Es decir, al límite a falta de tan sólo una jornada para acabar la ligar. El empate ante el Barakaldo en el último partido y los que cosecharon sus inmediatos perseguidores, Peña Sport y Racing B, facilitaron la salvación.

EN LA 2006-2007

Tres años más tarde, el LCF golpeó primero: En la jornada tres, Pavone marcó uno de sus escasos goles con la elástica rojiblanca para forzar la derrota del Logroñés. Pero en la 22, el Logroñés se tomó cumplida venganza. Recibió un gol en propia puerta de Galiano, pero supo darle la vuelta, sobreponerse a la adversidad y dar otra alegría a su parroquia, gracias a los tantos de Ailton y Pita.

No fue sólo una anécdota: hasta entonces, el CF había estado muy cerca de los puestos de cabeza y llegaba al encuentro en sexta posición. Después de la derrota ante el Logroñés, en un partido en el que los de Balta fueron incapaces de manejar el centro del campo, el equipo rojiblanco comenzó a sufrir una severa crisis de resultados que le alejaron por completo de cualquier opción, en una recta final lastimosa para uno de los mejores equipos hasta el mes de enero, hasta ese derbi.

La lógica dicta que, si el derbi de ida de esta temporada acabó en empate, el de vuelta también debería hacerlo así. Pero el fútbol es de todo menos lógico. ¿Se romperá el empate a todo el próximo domingo?