El derbi de Puerta

Sevilla y Betis vivirán este domingo en el estadio Sánchez Pizjuán, un nuevo capítulo del derbi hispalense, que, en esta ocasión, llega marcado por el espíritu de concordia entre ambas entidades nacido tras la muerte, el pasado mes de agosto, del jugador sevillista Antonio Puerta. Pero, además, los dos equipos están necesitados de sumar los puntos en disputa, dado que los nervionenses, que son octavos, tienen por primera vez en toda la temporada a tiro los puestos europeos de la tabla, mientras que los béticos, que no conocen la derrota desde la llegada a su banquillo de Paco Chaparro, podrían salir, al fin, de la zona de descenso tras su mejoría de las últimas semanas.

Precisamente el duelo de entrenadores, que protagonizarán el propio Chaparro y su oponente blanquirrojo, Manolo Jiménez, es otro de los alicientes de este encuentro. Se trata de dos técnicos de la casa, sevillanos y que, por lo tanto, saben perfectamente lo que supone este tipo de partidos para la capital de Andalucía. De todos modos, a nadie se le escapa que los locales parten como favoritos no sólo por su mayor potencial y la brillante trayectoria realizada en las dos últimas campañas, sino, además, por las numerosas bajas que presenta el Betis y que se centran especialmente en su defensa.

No en vano, Chaparro tendrá que improvisar en el costado zurdo, tras las bajas de Fernando y Vega, que dejan al canterano Toni, que también arrastra pequeños problemas físicos, como único jugador disponible. Así, en el caso de que Toni no supere finalmente dichas molestias, Melli e incluso Mark González podrían estar en esa banda, para 'tapar' las incursiones de los temibles Alves y Jesús Navas. El meta Ricardo, por contra, se ha recuperado de su lesión y podría reaparecer mañana bajo palos, en detrimento de Casto, que ha suplido en la portería albiverde al internacional portugués en las últimas semanas.

Por contra, el Sevilla pondrá en liza su once de gala. Pero, como volvió a demostrar en Copa el pasado miércoles el modesto Denia, la principal preocupación en el lado blanquirrojo estriba en la alarmante debilidad defensiva que está sufriendo un equipo. Sin embargo, los de Nervión compensan esta carencia con su tremenda pegada arriba, donde Luis Fabiano ha comenzado el nuevo año como acabó el anterior: marcando goles.

Sea como sea, el Betis parece que, tras un pésimo arranque de campaña, sabe por fin a qué juega y, sobre todo, se ha convertido en los últimos partidos en un rival difícil de batir, por lo que se augura un partido que, como ya es habitual en los duelos de la máxima rivalidad sevillana, no carecerá de emoción ni de entrega por parte de no y otro contendiente.